martes, 11 de marzo de 2025

La filosofía moderna y actual en Ibáñez Langlois

Acabo mi lectura de Historia de la filosofía. Poemas, de José Miguel Ibáñez Langlois con la parte que se me ha hecho más pesada, la de la filosofía moderna. La filosofía actual, en cambio, era más interesante. Se centra especialmente en Descartes, pero también en Nietzsche, al que parece admirar, dentro de la radical diferencia de pensamiento, y en filósofos actuales, especialmente Husserl, Heidegger y Sartre. Acaba hablando del estructuralismo. Se asoma un poquito a Foucault, pero hasta ahí llega.

A mí me ha gustado este poema sobre la "posibilidad de la no clarificación":

Unaufgeklärtheitsmoglichkeit
qué nombre más complicado para una cosa que no existe
en la historia de la filosofía los nombres más complicados
se los llevan las cosas que no existen
las cosas que no existen
tienen una rara predilección por el alemán para no existir
prefieren no existir en alemán
lo cual es una forma de inexistencia mucho más perfecta
que dedicarse a no existir en sánscrito
o en inglés por ejemplo qué vulgaridad
o en latín por ejemplo donde todo existe (p. 216, n. 94).
No sale gente como Malebranche en esta Historia de la filosofía, pero sí el cura de Ars:
El santo Cura de Ars fue contemporáneo de Fichte Schelling Hegel
pero por cierto que no leyó sus obras
a duras penas leyó el Catecismo de Trento para los párrocos
en su formación eclesiástica
tuvo serios problemas con la lógica y la metafísica lo dejaron ordenarse por misericordia
pero por su confesonario pasó de rodillas casi todo el siglo XIX
y sus diez horas diarias de confesión le abrieron todos los secretos
sobre Dios sobre el alma sobre el mundo
ojalá Fichte Schelling y Hegel hubieran pasado de rodillas por su confesonario
otro gallo cantaría en el siglo XX
oh lógica oh metafísica trascendental
estas cosas no se consignan para vuestro honor y gloria (p. 217-218, n. 97).
Y ya digo que por Nietzsche siente una debilidad que no es debida a sus ideas, sino a su pasión:
Amaba a los animales y las flores silvestres
Italia Cristo y la música lo hacían llorar
de ternura de pura belleza de oscura envidia
era un poeta muy superior a Heine o Hölderlin
no se sabe si Zaratustra hablaba por él o si era ventrílocuo
escribía los Evangelios al revés
de rodillas sobre una tierra imaginaria más allá del bien y del mal
odiaba a Dios con tal intensidad
que un día se convirtió en el revés de sí mismo en su más allá
se convirtió en un Nietzsche imaginario
de rodillas sobre una tierra espantosamente real
llorando a mares sobre su propia tumba
susurrando a las flores del sepulcro
guarden bien mi secreto
yo soy Dios y por eso enloquecí (p. 238-239, n. 25).

lunes, 10 de marzo de 2025

Hablo de Tolkien y el lenguaje

El viernes vi que ponían en línea mi intervención en una mesa redonda sobre Tolkien, del 5 de octubre (hablé de ello aquí).
Me puse a oírme a ver si yo hablando me resultaba raro a mí mismo y resulta que me gustó lo que me oí, donde comprobé que las acusaciones que le hacía yo a Frazer de gustarse oírse bien que se cumplían conmigo (otro ejemplo del no juzguéis y no seréis juzgados que me descubro que me vuelve como boomerang a darme en el bebes).

Mi intervención comienza en el minuto 41 y dura casi media hora:
 
Así, tengo ya tres sesiones en youtube con esta sobre El banquete de Platón y esta sobre la Odisea.

jueves, 6 de marzo de 2025

La historia cíclica

De El factor humano, de Graham Greene, esta frase que me quedé:

Un prejuicio tiene algo en común con un ideal. Cornelius Muller carecía de prejuicios y, en consecuencia, de ideales (122).

Yo tengo muchos prejuicios, así que, por mi parte, bien. Por ejemplo, miro con malos ojos la palabra 'soviet', y eso que significa 'consejo', simplemente. Veo un cartel como este y, a continuación, me doy a melancólicas reflexiones:

miércoles, 5 de marzo de 2025

Una decisión original

Está muy bien Una decisión original. Guía para casarse por la Iglesia (Madrid, Palabra, 2023), de Nicolás Álvarez de las Asturias, Lucas Buch y María Álvarez de las Asturias. Yo he puesto una foto de Amazon de la 2ª edición, pero lo que yo leí es de la tercera: es claramente un libro necesario ahora, cuando se está generalizando la convivencia como esposos, pero sin casarse. Las leyes de divorcio hacen muy fácil romper matrimonios y las bodas van camino de equipararse con las antiguas Bodas de Plata, cuando ya los dos estén bien asentados, completamente seguros de que se quieren de verdad y con la oposición aprobada y una casa en propiedad, a ser posible. 

A mí me da pena que la gente no se case. Ya sé que la presión ambiental y hasta las políticas sociales van en contra, pero me gustaría que la gente se casase, porque es mejor para ellos, con el componente de riesgo y dificultades que seguro que van a encontrar. La renuncia a las formalidades y la ausencia de compromiso, que se disfraza de autenticidad, lleva a unas relaciones que no pueden ser tan de entrega como en el matrimonio, aunque también haya matrimonios con falta de compromiso. Yo querría que la gente se casase, que se casasen muy enamorados y que tuvieran ayuda en toda su vida matrimonial para saber superar las dificultades. Y que su matrimonio se llenara de la bendición de los hijos. 

El libro es muy positivo, muy animante, facilitando la comprensión de lo que es un sacramento, el del matrimonio, en la Iglesia.

martes, 4 de marzo de 2025

La filosofía en la Edad Media según Ibáñez Langlois

Del libro Historia de la filosofía. Poemas, de José Miguel Ibáñez Langlois, una buena parte se dedica a la filosofía medieval y en concreto a santo Tomás de Aquino, que es un claro favorito suyo. Esa es una de las ventajas de este libro, que es una Historia de la filosofía desde una óptica personal, no siguiendo los caminos más trillados. Por ejemplo, el apartado de la Edad Media en realidad comienza con la cuestión más amplia del cristianismo y la filosofía. Este poema breve da la tónica:

El sermón de la montaña no es en absoluto filosofía
pero qué sería de ti historia de la filosofía
si en la cumbre de la montaña no se hubiera posado el Logos
a soplarte al oído las conclusiones (p. 91, n. 4).

Me gusta mucho también cómo habla del discurso del Areópago de san Pablo, desde la perspectiva de su auditorio de filósofos griegos un poco pasados de vueltas:

(…) bonita introducción la del judío
ahora se ha puesto a hablar de un Dios que creó la tierra y los cielos
se ha puesto a hablar al viento súbitamente
crear ha dicho crear oyeron este hombre está
ta
crear el universo de la nada
los atenienses se miran con aire de condescendencia
miran al viento como pidiéndole comprensión
en sus ojos refulge el universo eterno
el cosmos que en sí reposa como un absoluto
incluidos los dioses y aun el Theos
en los ojos del hebreo en cambio brilla la nada
que circunda a su único Dios como un aura imposible
el hebreo está a punto de irse en el viento
el hebreo hace juegos de palabras con el ser del mundo
pases mágicos al uso de los orientales
pretende que el ser del mundo es un ser prestado por el momento
en los ojos del hebreo refulge la locura
y la más absoluta falta de consideración por el universo
en los ojos de los atenienses brillan segundo por medio
la risa y el furor
hebreo te oiremos otro día sobre tu famoso Desconocido
le dicen y todo el mundo en Atenas sabe
que esta fórmula de cortesía filosófica quiere decir
ándate a freír espárragos con tu incógnito creador (p. 93, n. 7).
Ya propiamente en la Edad Media, este poema se centra en san Bernardo:
San Bernardo de Claraval la flor y nata
de los caballeros andantes de Jesucristo
de los cruzados más trasparentes de la Virgen María
de las fuerzas de choque del Espíritu Santo
en el espacio puro de la contemplación
cuando Bernardo reza cuando habla y llora
se estremecen los cedros del Líbano y los reyes y papas
y los filósofos sienten pasar el logos
como una paloma ardiente a través de los silogismos
y otra vez queda patente la esencia del filosofar
a saber el vuelo del alma en busca del Verbo
y todos los humanismos huyen avergonzados
y todas las dialécticas tiemblan y retroceden
y todos los Abelardos desaparecen en sus Eloísas
al paso de Bernardo o el amor de Dios
Bernardo o la quimera de su siglo en llamas
o el logos que sobrepasa infinitamente al logos
en el espacio inmóvil de la contemplación (p. 115 n. 38).
Podría copiar muchos, pongo este en el que se ve nacer la crisis posterior:
La terrible odisea de los tiempos modernos
comenzó dos siglos antes de los tiempos modernos
comenzó en el corazón de un ángel franciscano
que obedecía al nombre de Duns Scoto
cuando por respetables razones teológicas e incluso místicas
dejó que en su corazoncito hermano del agua etc
la voluntad desnuda se empinara
un milímetro por encima de la inteligencia
quién diría el furor de ese corazoncito ciego
quién diría el horror de ese amorcito sin inteligencia
quién diría el futuro de ese milímetro llamado voluntarismo
mucho más que la caída de Bizancio
mucho más que el descubrimiento de América y la invención de la imprenta y otras minucias por el estilo
fue ese milímetro de voluntad desnuda
fue la voluntad en régimen de inteligencia
el origen de ese torrente de cógitos y espejismos y revoluciones y luteranas lágrimas
que obedece al dulce nombre de tiempos modernos (p. 145, n. 85).

Esta es la portada de la edición chilena actual (yo he leído la española, en Rialp

lunes, 3 de marzo de 2025

Nevando en Burgos

Ayer cayeron unos copos, unos pocos copos de nieve, para dar la nota in bellezza a un fin de semana muy frío en las calles de Burgos, pero muy entretenido en todo lo demás. Celebramos el cumpleaños de mi hermana, empatamos al parchís, comimos muy bien y yo veía cómo preparaban todo y lo laborioso que es hacer buenas comidas: lentejas, alubias de Ibeas, tiramisú, fresas con azúcar y vinagre (mi forma favorita de comerlas), pollo. Fuimos a un mercado al aire libre y el aire congelador mantenía las hortalizas y las naranjas (ahora, de Málaga) bien frescas. 

En el camino, además de un acongojante ruido de los frenos cada vez que tenía que parar, sobre todo en los múltiples pasos de cebra y similares del tramo de pesadilla que queda todavía sin ser autovía, entre Arzúa y Melide (que Dios confunda, al tramo me refiero), escuché un programa extraordinario, excelente de principio a fin, sobre El esplendor del cuerpo humano y los Padres de la Iglesia, donde Davide Tomaselli habla de un modo luminoso y con una claridad impresionante sobre algo que se suele exponer de modo tedioso (me refiero a la Patrología). El programa es tan redondo que acaba con la lectura de un poema de Enríque García-Maíquez que cuadra perfectamente ahí.

Qué diferencia la Patrología cuando se sabe explicar bien, como aquí:

jueves, 27 de febrero de 2025

Sánchez Mazas con una versión de Du Bellay

Leí la antología de poemas de Rafael Sánchez Mazas y no me acabaron de convencer. Me quedo con esta versión que hizo del famoso poema de la vuelta de Ulises, de Du Bellay (hace tiempo había puesto yo aquí otra de Carlos Clementson)
HEREUX QUI COMME ULYSSE A FAIT UN BEAU VOYAGE.
de Joaquin Du Bellay

Feliz quien como Ulises viaja con buena suerte
o conquista los áureos vellones de Jasón
y después, a la vuelta, con madura razón,
dichoso en casa espera que le llegue la muerte.

Aldea de mis padres: ¿cuándo volveré a verte,
con tus humos azules? ¿en qué clara estación
volveré a ver el huerto de mi pobre mansión,
que vale para mí como el reino más fuerte?

Más me placen los muros alzados por los míos
que los templos de Roma soberanos y fríos;
más que mármoles duros quiero pizarra fina.

Más mi Loira francés, que el gran Tíber latino,
más mi monte Lyré, que el monte Palatino
y más que olas del mar, mi canción angevina.