En enero de 2015 acabe (por fín) de contar cosas de Zagreb y Croacia.
Lo más clásico que vi en Zagreb fue el Apoxiomeno de bronce que encontraron en el mar, una de las mejores esculturas griegas que haya visto.
De los días en Croacia solamente uno fui a la costa. Tengo el recuerdo del azul intensísimo del mar.
El edificio que más me impresionó fue el de los Archivos Nacionales, una maravilla. A continuación fui a visitar el Jardín Botánico, muy bonito también. Cerré Zagreb con fotos de edificios, algunos sin restaurar.
---
También ese mes me dio por hacer bromitas pseudo-eruditas con una frase que leí sobre el electricista que robó el Codex Calixtinus de la Catedral.
Leí la autobiografía dialogada de Robert Spaemann, un gran libro (del que recogí otras frases aquí).
Ponía unos aforismos impresionantes, sobre el sacrificio, de Lec.
La vuelta a la realidad circundante fue hacer fotos de las pintadas de mi Facultad, abriendo una línea fructífera (o por ejemplo esta otra pintada).
No hay comentarios:
Publicar un comentario