jueves, 6 de septiembre de 2018

Arqueología en el Museo de Pontevedra (I)

Aproveché un día de agosto para acercarme al Museo de Pontevedra, a ver sobre todo la parte de arqueología. Ya la conocía de hace años, pero es que ahora está, como dicen, «musealizada» de un modo nuevo.

Estas hachas siempre me gusta verlas. Me recuerdan a las que encontrábamos en Castrojeriz:



Y aquí además puntas de flecha:


Este tesoro de objetos de oro macizo sí que es impresionante, no esa ollas llenas de moneditas que aparecen habitualmente:


Esto lo recordaba: producción industrial encontrada así, tal cual, 156 hachas de bronce puestas en cuatro capas, quizá preparadas para la distribución. Pero ahí se quedaron olvidadas durante 3000 años:


Este caldero, aplastado también durante un montón de tiempo, desde el II a. C., hace ver que el bronce es como tela si lo aplastas durante milenios:


Foto que hice a riesgo de reflejos para que se viera el grosor:


De la cultura de los castros, estas figuras bifrontes, como Jano:


Esto es un material constructivo, «pallabarro»: madera unida con ramas de avellano y todo consolidado con barro, una especie de adobe más consistente:


El mítico «trisquel» que les vuelve tarumba a los misticistas, «celtistas» y demás ralea zumbada:


Bueno, esto se alarga. Mañana, la otra mitad

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