miércoles, 19 de octubre de 2011
De bautizo en Lugo (1 de 2)
El sábado fue Rafael -hace tres años fue Andrés, su hermano.
Llegué con veinte minutos de adelanto -casi no hubo milagrosamente camiones entre el aeropuerto y Guitiriz- y la querencia me llevó al Museo de Lugo.
Entre los cuadros había un Juicio Final. Me fijé más en los condenados, abajo a la derecha (es una deformación que me hermana con el mundo moderno) y me pareció ver, entre obispos y otros personajes allí metidos, una inscripción que identificaba a un personaje como Calvino:
Aquí lo tenéis:
Yo leo, poniéndome en la mejor disposición: Ego Calvinu[s?].
Y busqué más información, pero no hay mucho donde mirar. De milagro está esto en la penosísima web del Museo -que además está solo en gallego, no sea que venga algún forastero y la entienda -que ahora con internet, hasta entre gente que sabe inglés, un poner.
En esa misma cutreweb dicen que también está ahí -entre los condenados, WTF?- Felipe II.
Había frases como en catalán (Sortiu / A judici) y luego una cartela abajo en castellano: vamos, que o es un cuadro con más trastienda que Dan Brown o que alguien me lo explique.
Y le hice una foto con él móvil y sin flash y ahí ardió Troya. Pero mañana lo cuento, que esto se alarga.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Una frase que firmarían Ch B. y NGD: "Me fijé más en los condenados... una deformación que me hermana con el mundo moderno". Como ellos ya no están entre nosotros, te la alabo yo.
ResponderEliminarqué buenísimo el final.
ResponderEliminarQuedo a la espera de esa historia...
ResponderEliminarjeje me parece que los obispos estan metidos en problemas...
ResponderEliminar