Para el examen del viernes había pensado un sistema que me pareció excelente -como mío- para no perder tiempo entre las dos partes (traducción de texto de Lisias sin diccionario / con diccionario): la idea era que dejaran el diccionario en el estrado y lo fueran recogiendo a medida que terminasen la primera parte.
Pero me encontré a los alumnos ya sentados y poco dispuestos a moverse. Lo de dejar el diccionario lejos les parecía un poco absurdo. Y a mí también me lo empezó a parecer ya. Al final, los dejaron en el estrado, pero juntos en mogollón. Al menos, de rebote, conseguí una instalación/ performance:
Al principio del examen:
A medida que iban terminando, se lo iban llevando:
Lo que no sabía yo es que el diccionario iba a ser la tumba de unos cuantos, que buscaron καταλέξαι -enumerar- y al encontrar κατάλεξαι (¿pero el acento no cuenta?) -acostarse- convirtieron un episodio histórico en una escena de cama. Ay, el Vox, que daño ha hecho -cuando se usa mal, eh.
Nos gustaría saber las dos versiones, la digital y la grecoerótica, para reirnos...
ResponderEliminarY digo yo... ¿qué pensarán los alumnos al verte fotografiando sus diccionarios con el móvil? ¡Ojalá alguno de ellos leyese y comentase este blog!
ResponderEliminarLo siento, Ignacio, es la ley de protección de datos, supongo. Bueno, otra maldad: Lisias decía que Jerjes atacó Grecia con "doscientas y mil" naves. Hubo unos cuantos alumnos que, ni cortos ni perezosos, pusieron "200.000 naves".
ResponderEliminarAntón, no sé si entran aquí. Yo creo que no se dieron cuenta de que estaba haciendo las fotos.
Fuiste a pillar...mal.
ResponderEliminarNo, no. Yo iba de buen rollo.
ResponderEliminarHola Ángel, si entramos... Jejejejejeje. Y no, no nos dimos cuenta de las fotos... Bueno, no hay queja, no fue tan mal método el de los diccionarios :)
ResponderEliminarBuen profesor, mejor persona.
ResponderEliminarUna alumna.
Los nervios siempre nos matarán...
ResponderEliminarSi que lo leen, sí, que la red es muy libre
ResponderEliminar