martes, 31 de diciembre de 2013

Mis libros de 2013

Los libros que más me han gustado en 2013 (en orden alfabético):

Enrique Baltanás. La obra común de los hermanos Machado. Sevilla: Renacimiento. 2010
Isaac Bashevis Singer. Cuentos. Barcelona: RBA. 2011
Amalia Bautista. Falsa pimienta. Sevilla: Renacimiento. 2013
José María Cabodevilla. El cielo en palabras terrenas. Madrid: Paulinas. 1990
Julio Caro Baroja. Semblanzas ideales. Madrid: Taurus. 1972
Gabriel Insausti. Cristal ahumado. Valencia: Fundación Mainel. 2006
José Jiménez Lozano. Retratos y naturalezas muertas. Madrid: Trotta. 2000
José Jiménez Lozano. El precio. Antología poética. Renacimiento: Sevilla. 2013
Alejandro Llano et alCaminos de la filosofía. Pamploan: Eunsa. 2012
Agustín López-Kindler. Antonio Fontán. Confidencias y afanes de madurez. Madrid: Fundación Antonio Fontán. 2011
Museo Nacional Colegio de san Gregorio. Colección. Madrid: Ministerio de Cultura. 2009
Eugenio d'Ors. Último glosario. Granada: La Veleta. 1998
Eugenio d'Ors. Trilogía de la Residencia de Estudiantes. Eunsa: Pamplona. 2000
Miguel d'Ors. Átomos y galaxias. Sevilla: Renacimiento. 2013
Juan Carlos Pascual de Cruz. Lorenzo de Ávila. Una ilusión renacentista. Zamora: IEZ. 2013
Joseph Pearce. Race with the Devil. Charlotte NC: Benedikt Press. 2013
Pedro Sáinz Rodríguez. Testimonios y recuerdos. Barcelona: Planeta. 1978
Andrés Trapiello. Miseria y compañía. Valencia: Pre-textos. 2013
Peter G. Walsh, Christopher Husch, eds. One Hundred Latin Hymns. Cambridge Mass.: Harvard University Press. 2012
Evelyn Waugh. Robo al amparo de la ley. Madrid: Homo legens. 2008

jueves, 26 de diciembre de 2013

Feliz Navidad - El tercer Himno de Pedro Abelardo que pongo

Quam beatum
      stratum hoc straminis,      Qué bienaventurado este estrado de paja,
tantae latus
      quod pressit virginis,     el costado que aplastó de tan gran Virgen,
quo parvulus
      nascens excipitur      donde es recibido el niño al nacer
cuius palmo
      caelum concluditur.       en cuyo puño el cielo se encierra.

In sericis
      reginae ceterae       Entre sedas las demás reinas
summo solent
      dolore parere;       con inmenso dolor suelen parir;
vilis strati
      beatus lectulus        de vil estrado la bienaventurada yacija
omnis fuit
      doloris nescius.       toda fue ignorante del dolor.

Regum satis
      in alimonia       De reyes bastante para alimento
sunt subacta
      nutricum ubera.     son dirigidas los pechos de nodrizas.
Educatur
      lacte virgineo,       Es criado con leche virginal
virgo clauso
      quem fudit utero.      [aquel al] que una virgen derramó con su seno cerrado.

Nulli regum
      inter tot epulas,       A ningún rey entre tantos banquetes
inter tantas
      et tot delicias,       entre tantas y tan grandes delicias,
concessum est
      ut lacte virginis       se le concedió que de la leche virginal
quis de suis
      alatur parvulis.       alguno sea alimentado de sus criaturas.

Virgo pauper
      fortassis esurit,       La Virgen pobre quizá pasa hambre,
quae parvulum
      hoc lacte reficit.       la que al niño con esta leche repara.
Stupent caeli,
      mirantur angeli,       Se asombran los cielos, se admiran los ángeles,
obsequio
      lactantis seduli.       en obsequio del afanoso lactante.

In excelsis
      sit Deo gloria.       En las alturas sea a Dios la gloria.
pacis nobis
      in terra foedera.       De paz a nosotros en la tierra alianzas.
Quam super his
      voces angelicae       La que por esto las voces angélicas
decantasse
      noscuntur hodie.      se sabe que cantaron hoy.

Como los otros dos, con traducción muy literal; y en este caso, con frases mucho más complejas (y cf. en inglés Walsh/Husch)

martes, 24 de diciembre de 2013

Feliz Navidad - Otro himno de Pedro Abelardo

Verbo Verbum
     virgo concipiens,      Con una palabra a la Palabra la Virgen concibiendo
ex se verus
     ortus est Oriens,       de ella el verdadero nació Oriente,
A quo vera
     diffusa claritas       del que la verdadera difundida claridad
Circumductas
     abduxit tenebras.      a las que rodeaban expulsó tinieblas.

Felix dies,
     dierum gloria,      Feliz día, de los días gloria,
Huius ortus
     quae vidit gaudia.      de este nacimiento que vio los gozos.
Felix mater
     quae Deum genuit,       Feliz madre que concibió a Dios,
Felix stella
     quae solem peperit.      feliz estrella que al sol parió.

Quam beata
     pauper puerpera,      Qué bienaventurada la pobre parturienta,
cuius partus
     ditavit omnia.       cuyo parto enriqueció todo.
Pauper, inquam,
     sed celsa genere,      Pobre -digo- pero alta de linaje
pontificum
     et regum sanguine.       de sangre de pontífices y reyes.

Vitae viam
     in via peperit;     De la vida la vía en la vía parió;
hospitium,
     non domum habuit,      albergue, no casa tuvo,
Regum proles
     et caeli domina      de reyes la prole y del cielo la señora
pro cameris
     intravit stabula.      en lugar de cámaras entró en establos.

Obstetrices
     in partu deerant,      Matronas en el parto faltaban,
sed angeli
     pro eis aderant.      pero los ángeles por ellas asistían.
Quorum statim
     chorus non modica      De los cuales al instante el coro no pequeños
huius ortus
     eduxit gaudia.      de este nacimiento sacó los gozos.

Defuerunt
     fortassis balnea,      Faltaron quizá baños,
sed quam lavent
     non erat macula.      pero a la que lavarían no tenía mancha.
Non est dolor
     quam illa relevent,      No hay dolor que ellos tengan que aliviar,
Nec scissura
     quam illa reparent.      ni rotura que reparar.

In excelsis
     sit Deo gloria,      En las alturas sea a Dios la gloria
pacis nobis
     in terra foedera.      de paz a nosotros en la tierra acuerdos.
Quam super his
     voces angelicae      La que sobre esto las voces angélicas
decantasse
     noscuntur hodie.      es conocido que hoy cantaron.

Mi traducción muy literal de Pedro Abelardo (cf. la edición de Walsh-Husch)

lunes, 23 de diciembre de 2013

Feliz Navidad - Un himno de Pedro Abelardo

Dei patris   
    et matris unicus,    De Dios Padre y de su madre único,
In praesepe   
    pro cunis positus     en el pesebre en lugar de cuna puesto
angustias   
    praesepis sustinet,    las estrecheces  del pesebre soporta
quem ambitus   
    caeli non continet.    [aquel] a quien el espacio del cielo no contiene.

Excipitur    
    vili tugurio,    Es acogido en una vil choza
qui praesidet   
    caeli palatio.    el que preside en el palacio del cielo.
Quis super hoc,   
    quis non obstupeat?     ¿Quién sobre esto, quién no se pasma?
Cuius mentem    
    hoc non commoveat?    ¿A quién la mente esto no conmueve?

Pauper Deus,  
    immo pauperrimus,    Pobre Dios  mejor, paupérrimo,
Sic factus est    
    pro nobis omnibus.    así se ha hecho por todos nosotros.
Quae sunt grates,   
    quae retributio    ¿Cuáles son las gracias, cuál el pago
super istis   
    a nobis Domino?   por esto de nosotros al Señor?

In praesepi   
    vagit ut parvulus,    En el pesebre llora como bebé
qui concutit   
    caelum tonitrubus.    el que golpea el cielo con truenos.
Stratum habet   
    faeni reliquias,    [por] estrado tiene de heno las reliquias,
Qui regibus    
    largitur purpuras.   el que a reyes regala púrpuras.

Bestiarum   
    infertur pabulo    De las bestias es puesto en el comedero
angelorum   
    ipsa refectio.     [el que] de los ángeles [es] la misma reparación.
Instat inde    
    grex animalium,   Apela desde allí la grey de los animales
hinc angeli    
    praebent obsequium.   desde aquí los ángeles traen el don.

In excelsis    
    sit Deo gloria.    En las alturas sea a Dios la gloria.
pacis nobis    
    in terra foedera.    de la paz a nosotros en la tierra alianzas.
Quam super his    
    voces angelicae    La que por esto las voces angélicas
decantasse    
    noscuntur hodie.    que lo habían cantado se conoce hoy.

Pedro Abelardo (mi traducción muy literal al lado, como apoyo; cf. Walsh - Husch en inglés 284-6)

viernes, 20 de diciembre de 2013

El Casino


José Luis Ríos, que es un fotógrafo excelente (mirad su blog / y de trasfondo, esta entrevista admirable con fotos grandiosas) me había mandado hace tiempo unas fotos de Castrojeriz, pero por Facebook: ni me di cuenta. Habían quedado en una carpeta perdida. Ahora me las he encontrado allí: un gran regalo de Navidad (mirad esta, esta, esta y esta).
Pero la que he puesto aquí me conmovió, aunque me cuesta recordar cosas del Casino: aquí íbamos algunos sábados y domingos por la tarde. Mi padre jugaba allí a las cartas, en unas ¿mesas de mármol?, creo. Tomaríamos quizá un Kas para compartir. Ahí le oí discutir con Paco, el marido de doña Rosalía, sobre si Franco era o no fascista, problemática que a mí se me escapaba, niño en torno al año 1975. Creo que estaba de camarero allí el cartero, pero hasta de eso me entran dudas.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Hacer currículums con The IT Crowd

Ahora lo último que nos toca hacer a los sufridos (bueno, no tanto) profesores es el Currículum Vitae Normalizado (CVN), idea del Ministerio de Economía y Competitividad (esos psicópatas: hasta aquí se meten).

Lo mejor son las indicaciones para la contraseña:
No se acepta una contraseña en blanco.
La contraseña debe tener 8 o más caracteres.
La contraseña distingue entre mayúsculas y minúsculas.
Las contraseñas deben tener:
Al menos dos letras, dos números y como mínimo dos caracteres especiales del teclado (* , $ . ; ? # etc.).
No se pueden introducir caracteres iguales consecutivos.
La contraseña no puede contener el email del usuario.
La contraseña caduca a los tres meses. No se puede introducir ninguna de las últimas cinco contraseñas.
Se debían de estar partiendo de risa al escribirlas, porque no se entiende tanta complejidad: qué hacker se va a molestar en entrar en el curriculum de un profesor universitario, que a estas alturas de la vida debe de haberlo dado ya a media humanidad. Yo al menos he hecho miles de ellos para miles de cosas. Y si no, Obama lo iba a leer igual.

El otro día llamé a los "Cinco Cincos" (así los llamamos en la Universidad de Santiago. Número: 55555), a los servicios informáticos y la que me cogió el teléfono dijo: "Servicios[¿zos?] informáticos". Y se calló. Yo dije: "Qué" y esperé. Lo repitió y casi podríamos haber estado media hora. Fue fascinante.

Grande, la peña de informática.

martes, 17 de diciembre de 2013

Odisea 7

Seguimos, qué bien, en el país de los feacios, donde:
-Hay barcos rápidos como el ala o el pensamiento (7.36 τῶν νέες ὠκεῖαι ὡς εἰ πτερὸν ἠὲ νόημα).
-Siendo de familia de Poseidón y los gigantes (7.56-60) y emparentados pues con los Cíclopes, se han sabido quitar el pelo de la dehesa. Tienen una fuerte conciencia de la presencia de la divinidad: justifican su hospitalidad a Ulises en que quizá sea un dios (7.199). Es muy interesante la reacción de este: no, no lo soy (7.208-9).
-El palacio de Alcínoo es todo de metales: muros y suelos de bronce, dinteles de plata, puertas de oro (7.86-90), como las estancias de los dioses del Olimpo (y como el broncíneo Tártaro: pero aquí los muros tienen esmalte azulado) porque lo importante es resaltar su durabilidad, su permanencia. ¿Aire oriental?
- Perros robot de plata y oro hechos por Hefesto: ¿automáticos? para defender (7.91). Dentro, figuras de oro de muchachos con lámparas (7.100) [y el elefante en la habitación: 50 esclavas (7.102)].
- Viven allí sin vejez por todos los tiempos, por siempre inmortales (7.94 ἀθανάτους ὄντας καὶ ἀγήρως ἤματα πάντα).
- Jardín ideal, de frutos constantes en todas las estaciones (7.112-132).

El poder en ese país de Jauja es del rey, pero a quien tiene que acudir Ulises por indicación de Atenea (7.53) es al soft power (7.68) de la reina Arete, a la que le suplica de un modo sencillo y conmovedor: "Padezco hace tanto sin ver a los míos!" (7.152 φίλων ἄπο πήματα πάσχω).

Ulises les explica que Calipso "llena de engaños" (7.246 δολόεσσα Καλυψώ), no le persuadió "en su ánimo dentro del pecho" de que le iba a hacer inmortal (7.258: ἀλλ' ἐμὸν οὔ ποτε θυμὸν ἐνὶ στήθεσσιν ἔπειθεν). Ah, había trampa.

7.196 La clave de pisar de nuevo la tierra natal. 7.198-9 que -dice un feacio- ya le tocará sufrir por ser mortal. 7.224 Que vuelva a la tierra paterna y que muera luego.

7.210 Muy interesante reacción de Ulises a lo que le dicen los feacios de que ellos banquetean con los dioses: no tiene nada que ver con los dioses, el es mortal.

domingo, 15 de diciembre de 2013

Dante, Purgatorio canto 2

Celebro la fiesta grande de los Amigos de la Aurora (AA) con mi canto favorito de Dante (por ahora):

A pesar de las enfadosas referencias astronómicas al principio (por suerte breves), pronto entramos en un estado de alegría rebosante (aunque imperfecta, los personajes caerán en la cuenta al final), de descubrir que estamos en casa, salvados, aunque sea a la puerta y sucios.

Dante y Virgilio están al principio así también, primero desconcertados ("como gente que piensa sobre su camino, / que va con el corazón pero en cuerpo se demora": come gente che pensa a suo cammino, / che va col cuore e col corpo dimora) y luego alegres.

Y entonces aparece la Aurora, de mejillas blancas y rosadas (2.7). Su blanco cuesta decir cómo era (2.23 "un no sabía qué blanco": un non sapeva che bianco), que pronto es superado por otro blanco mayor (2.26), el de las alas de un ángel que las usa de velas (2.32 "no quiere remos, ni otras velas / que sus alas": sì che remo non vuol, né altro velo / che l’ali sue), que es un uccel divino (¿gorrión?) y va en un barco (2.41) y "parecía un santo con inscripción" (así lo entiendo yo, sin saber: pareva beato per iscripto).

Y en la barca trae a cien que se han salvado. Ahora, ya sí, el sol asaetea el día (2.55). Esas almas al principio están desconcertadas. Cuando ven (2.68-9) que Dante todavía respira se quedan muertas (maravigliando diventaro smorte). Se deben de pensar: ¿pero entonces esto es todavía el mundo? ¿No nos habremos salvado? Pero lo siguiente es ir a hablar con él, olvidadas de que tienen que hacer una larga subida hasta el cielo. Están tan contentas que lo que quieren es comentar la jugada (2.75 "olvidándose casi de ir a hacerse bellas": quasi oblïando d’ire a farsi belle).

También Dante ve a un conocido. Le quiere abrazar y tres veces no puede, porque es un cuerpo de humo (2.79-81 Crespo recuerda Virg. Aen. 6.700-702; yo recuerdo la Odisea 11.205-7, modelo de Virgilio. Pero mirad qué bonitos los versos de este:
Ter conatus ibi collo dare brachia circum,
ter frustra comprensa manus effugit imago,
par levibus ventis volucrique simillima somno.
tres veces allí intenté echar los brazos al cuello
tres veces en vano apretada de mis manos huyó la imagen
igual a los leves vientos y parecidísima al sueño volador)
A ese amigo al que Dante ha querido abrazar le pregunta que por qué ha muerto tan joven, que "cómo le han quitado tantas horas" de su vida, en un verso bien bonito (2.93): diss’io; "ma a te com’è tanta ora tolta?. Era un amigo que le había puesto música a algunos poemas suyos.

Todos se ponen bien contentos (2.112-121), pero no pueden pararse allí: el hecho es que están tiñosos (2.122). Cierra el canto un símil precioso: son como las palomas comiendo, olvidadas de "su habitual orgullo", que dejan de golpe la comida (2.129) "porque han sido asediados de un cuidado mayor": perch’assaliti son da maggior cura. Ante la aparición de un anciano que les reconviene, huyen todas hacia arriba.

viernes, 13 de diciembre de 2013

Trieste - Porto do Son

Azuzado por el buen sabor del artículo, me puse a mirar libros de Trieste en mi biblioteca.

Había dos de Porto do Son, una colección de poesía en gallego de título excelente, tomado de un pueblo de la ría de Noia: uno de Luis Rei Núñez y otro de Miguel Anxo Fernán-Vello. Estuve en un recital de este, que me vacunó contra su poesía, pero la portada no es suya (y es excelente):

miércoles, 11 de diciembre de 2013

Odisea 6

6.9-10 El ideal país de los feacios, con los elementos que definen toda ciudad: murallas, viviendas, templos y reparto de tierras de labranza.

6.42-44 El Olimpo, morada de los dioses, sin vientos, lluvias ni nevadas (eso ya antes, como marca paradisiaca de los Campos Elisios: 4.565-9). Problema: que es un monte nevado. Justificación aquí: que está en el éter (αἰθήρ), por encima de nuestro mundo, en el que bebemos aire (ἀήρ) y sufrimos los vaivenes del clima.

6.54 En el país de los feacios sí que hay un Consejo que funciona (no como en Ítaca, que por lo tanto es una ciudad con muchos problemas: en el canto 24 se verá con toda su crudeza).

6.57 La princesa Nausícaa (uno de mis personajes favoritos) quiere ir a lavar (según insinuación en el sueño de Atenea) para su boda, que parece próxima, pero diciendo que es para la colada familiar, porque le daba reparo hablar de ello (6.66). Y justo ahí se le aparece Ulises.

6.72 El carro de sólidas ruedas me recordó a los del Museo do Pobo Galego.

6.102 Nausícaa juega a la pelota (?) y canta con sus criadas (cf. la lírica coral -y mención de coros en 6.157- y los partenios de Alcmán).

6.127 Espectacular aparición de Ulises -como un monstruo salado- ante Nausícaa. 6.147-186 Discurso que le dirige a ella, lleno de piropos, que termina con que (6.183) lo más que se puede desear es "el marido y la mujer unidos".

6.230 Después de lavado, Ulises es otro y sus cabellos son ahora cual flor de jacinto (ὑακινθίνῳ ἄνθει ὁμοίας): ¿por los rizos ahora limpios y curvos como los pétalos de la flor, por el color, que se tenía que percibir como oscuro (la barba de Ulises, decíamos ayer, era azul oscura/negra 16.176)? Sin embargo, el pelo de Ulises es rubio en 13.399 y 431, el color prototípico de dioses y héroes (ya daquela, era mejor rubio que moreno). Como comprenderéis, los partidarios de varios autores de la Odisea, se fijan mucho en cosas como esta (todo esto, en el comentario de J. B. Hainsworth).

6.244 y 6.277 Deseos de Nausícaa de casarse con Ulises. 7. 313 También lo dice Alcínoo. Mi consejo a Ulises: ¡Esto es una trama, Ulises, escapa!

6.294 Decir que algo está "a distancia de un grito".

martes, 10 de diciembre de 2013

Dante, Purgatorio, canto 1: Pica pica

Me costó terminar el Infierno, ya lo conté. Pero me bastaba con ir encontrando cosas valiosas cada poco. Ya lo disfrutaré de verdad en la segunda lectura.

En cambio, por el principio del Purgatorio voy de alegría en alegría. Puede parecer una tontería, pero qué bien al principio del canto I encontrarme a mis queridas urracas, cuyo negro con reflejos azules lo descubrimos el otro día nada menos que en las barbas de Ulises (Od. 16.176: azuladas se le pusieron las barbas por el mentón, κυάνεαι δ' ἐγένοντο ἐθειράδες ἀμφὶ γένειον).

Dante las llama míseras (le "Piche misere" 1.9) a las pobres pegas, a las urracas (la Pica pica de nombre latino: hasta en eso son pobres), seguramente para hacerle la rosca a las Musas, que según Ovidio (Met. 5.294 ss.) se quedaron con el monopolio de la inspiración poética. Para ello, convirtieron a las nueve pobres hijas de Píero, que se atrevieron a plantarles cara, en esos pájaros tan maltratados por una conspiración (ahora lo entiendo) de poetas pelotilleros de la Musas a escala cuasi-mundial.

Ovidio termina el episodio contando que, convertidas en urracas, lo que les queda, además de su antigua facundia, es la ronca palabrería y el tremendo afán de hablar (5.678: raucaque garrulitas studiumque inmane loquendi).

Ovidio: esta te la guardo.

sábado, 7 de diciembre de 2013

Sonido Donosti

Últimamente toda la música moderna que oigo es a través de NPR Music (me las doy de liberal, pero siempre acabo en la pública) y a través de ellos a dos emisoras independientes (creo): KEXP y KCRW.

Cuando voy en coche oigo Radio 3 (aunque cada vez más Radio Clásica). Buscando un programa que me había gustado di el otro día con otro de Radio 3 extra (=solo en web) que se llama Retromanía: en el podcast que me bajé Homenajeaban a Family, un grupo de San Sebastián [=Donosti] que dio nombre a esa corriente que parece que tiene antecedentes en grupos como Vainica Doble y Décima víctima o incluso Esclarecidos. A mí, despistado en aquellos años, casi ni me sonaba ninguno de ellos, salvo La buena vida, que sí que conozco bien. Pero por Emilio Quintana me estoy poniendo algo a tono con el pop español sin complejos, así que este programa lo disfruté mucho.

Pusieron, aparte de canciones muy buenas de Family, esta, En un día gris, de Aventuras de Kirlian,

Que es un grupo que luego se llamó Le Mans. Mirad qué maravilla de canción, Con Peru en la playa:


Muy buen programa, Retromanía. También les escuché este que dedicaron a Morrissey. Los Smiths: mi grupo favorito de adolescente.

viernes, 6 de diciembre de 2013

Odisea 5

El canto 5 comienza con Titono y Aurora y a continuación se habla de otro mortal y otra diosa: Calipso (='la que oculta') es la diosa que "guarda" (ἴσχει) a Ulises "por fuerza" (ἀνάγκῃ 5.14-15) en su isla. Parece que ella repetía que iba a hacer a Ulises "inmortal y sin vejez todos los dias (=siempre)" (5.136: ἀθάνατον καὶ ἀγήραον ἤματα πάντα), pero él no se fía un pelo de ella (5.172; en 5.153 se cuenta que a Ulises "no le agradaba la diosa"). Reconocerá que es más guapa que su mujer, pero a pesar de todo quiere volver a casa y ver el día del retorno (5.220 οἴκαδέ τ' ἐλθέμεναι καὶ νόστιμον ἦμαρ ἰδέσθαι). La mortalidad de Ulises es un tema que recorre toda la obra y la inmortalidad que le ofrece Calipso es una tentación de algo imposible que él es muy sensato de comprender que no está a su alcance.

5.18-22 Quejas de Atenea: nadie se acuerda en Ítaca de Ulises: así le pagan. Es un tema repetido el de la ingratitud de sus súbditos, que justifica su durísima actuación al final. Pero tendrá que pasar por muchas pruebas antes: "soportaré en mi pecho con ánimo sufridor-de-desgracias" (5.222 τλήσομαι ἐν στήθεσσιν ἔχων ταλαπενθέα θυμόν).

5.56 "mar de color de violeta" (πόντου βὰς ἰοειδέος) [para el archivo 'colores del mar'].

5.62 Mujeres y diosas siempre ocupadas: como Helena en 4.134, Calipso está trabajando en el telar; y como Circe, además canta 10.254.

5.68-73 Descripción del jardín de Calipso en dos trazos: una viña, cuatro fuentes en línea, prados de violetas y apios (λειμῶνες μαλακοὶ ἴου ἠδὲ σελίνου).

5.93 Qué comen los dioses: ambrosía y néctar, pero en 5.100 se queja Hermes de tener que cruzar el mar sin ciudades donde se hagan ritos y hecatombes (en realidad, se alimentan del humo de esos sacrificios). En cambio, Ulises come pan, agua y vino tinto (5.165: σῖτον καὶ ὕδωρ καὶ οἶνον ἐρυθρὸν). En 5.195-200 se sientan Calipso y Ulises a la misma mesa, pero comen cada uno lo suyo: no hay mejor ejemplo de la imposibilidad de armonía de vida en común. Lo contrario lo mostró Tolkien: en los amores de Beren y Luthien y en los de Aragorn y Arwen el amor les une porque son las inmortales las que se hacen mortales (y ahí la cuestión de que la muerte es un don de Ilúvatar).

5.184-191 Jura Calipso que no hará daño a Ulises. 5.189 Habla de que se pone en su lugar. 5.190-191 Alma de piedad, no de hierro, hay en ella. Más adelante se habla de otra diosa, Ino, que antes fue mortal y de su piedad con Ulises 5.336.

5.313-18 Impresionante descripción del naufragio. 5.337 Ino, ahora ya diosa, aparece como gaviota que al final se sumerge en el agua [ejem, no lo puse en mi recien publicado artículo]. Es llamativa su piedad (5.336 ἐλέησεν), quizá porque antes fue mortal.

5.390 Aurora 'de-hermosa-cabellera' (final de verso: ἐϋπλόκαμος τέλεσ' Ἠώς =9.76, 10.144)  / 'De-trono-de-oro' (final de verso: χρυσόθρονος ἤλυθεν Ἠώς 10. 541).

5.488-90 Símil del que vive solo:
Como un hombre en remota heredad, sin vecinos en torno,
escondiendo un tizón en los negros rescoldos, reserva
la simiente del fuego y excusa el pedirlo a otra parte,
tal allí se cubrió con hojas Ulises.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Prudencio sobre Dios como fictor

Tu depositum tege corpus;
non immemor ille requiret
sua munera fictor et auctor
propriique aenigmata vultus.

Es lo último que cito por ahora del libro de los himnos latinos editado por Walsh/Husch, esto de Prudencio (80 n. 18.34.3) donde le pide a la tierra que cubra el cuerpo de un difunto (Tu depositum tege corpus), al que Dios, su fictor et auctor, no desmemoriado, le pedirá sua munera (sus dones), en concreto proprii aenigmata vultus (que los editores traducen por: his own countenance's mystic image): échale hilo a la cometa a ver cómo se traduciría más precisamente.
Quizá se pueda traducir literalmente diciendo: los dones que le dio, los enigmas del propio rostro.
Busco por google y me encuentro nada menos que a Derrida que lo comenta (¡yo citando a Derrida!).
Luis Rivero en la traducción de Gredos pone: "su donación, la representación de su propia imagen".
Y la edición francesa de Les Belles Lettres: "image de ses propres traits".
Aquí veo que Nebrija quería corregir los aenigmata por schemata ('rasgos', 'facciones'), sugerencia perfectamente razonable, aunque se carga todo el enigma así (y lo de la lectio difficilior).

Y lo de Dios como fictor bien impresionante que es: el modelador, el alfarero, pero de ahí viene la palabra ficción, por eso me llamó más la atención.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

En los días de la Aurora

Del libro que hablaba ayer, esto también  (del antiguo Himnario p. 118 n. 27.2) en estos días de auroras rutilantes:

Aurora stellas iam tegit                                  La Aurora las estrellas ya las cubre
rubrum sustollens gurgitem,                           sobreponiéndoles un rojizo desbordamiento,
umectis namque flatibus                                con humedecidos alientos
terram baptizans roribus                                a la tierra lavando con sus rocíos.

Venga, va, pongo una foto que hice hace una semana, desde mi habitación:

martes, 3 de diciembre de 2013

One Hundred Latin Hymns

He terminado de leer este libro feliz, tan afortunadamente acertado en todo: selección, notas, traducción, buen papel. Basta ver la portada:


Ya puse de él aquello de Cristo Aurora totus. Añado otras tres cosas en tres días. Hoy, esto:

p. 276 n.78.2 (de Pedro Abelardo), sobre el cielo, que empieza así:
Vere Ierusalem est illa civitas,                       De veras es Jerusalén aquella ciudad,
cuius pax iugis est, summa iucunditas,            cuya paz es eterna, su alegría suma,
ubi non praevenit rem desiderium,                 donde no va por delante de la cosa su deseo,
nec desiderio minus est praemium.                 ni que el deseo es menor el premio.

Y la estrofa 6:
Illic ex sabbato succedet sabbatum,              Allí al sábado sucederá el sábado,
perpes laetitia sabbatizantium,                       continua alegría la de los amantes del sábado.
nec ineffabiles cessabunt iubili                       y ni cesarán, inefables, los júbilos,
quos decantabimus et nos et angeli.               los que entonaremos nosotros y también los ángeles.
[lo del sábado es porque es un Himno para la Vigilia Pascual: es el sábado que es domingo]

lunes, 2 de diciembre de 2013

Semblanzas ideales, Julio Caro Baroja

El libro lo recomendaba Andrés Trapiello y qué más quería yo para poder en lo posible repetir la buena experiencia que tuve con Los Baroja, aquellas memorias familiares.
Y estas Semblanzas Ideales de Julio Caro Baroja sobre figuras bien interesantes de la primera mitad del XX las he disfrutado mucho, yo creo que hasta más: están escritas admirablemente: mesura, ritmo, serenidad (aunque no es muy objetivo con sus Barojas y también puede tener mala leche); un libro de prosa excepcional.

Yo, si tuviera que dar un curso sobre historia/literatura española del siglo XX, comentaría este texto tan bueno sobre Ciro Bayo, y tan ilustrativo de tantas cosas:
A veces, yo al oírle en el patio, bajaba. Siempre me proponía lo mismo: ir a ver «la parada» en la plaza de la Armería. No deseaba otra cosa. Pero había que pedir permiso a mi madre, y mi madre, amiga de pedagogos y pedagogas, con María de Maeztu a la cabeza, no era muy partidaria de don Ciro como preceptor o mentor. Al fin cedía. Ibamos el viejo y el niño por la calle de Ferraz y los Jardinillos, calle de Bailén arriba. Don Ciro se paraba un momento en el puesto de un hombre de barba gris que vendía pliegos de cordel, en el chaflán del Ministerio de Marina, frente a la plaza de España. Era aquel hombre asimismo un superviviente de épocas ya remotas, que aún creía que podía conmover al público, ofreciéndole relaciones sobre la guerra del 60 y el general Prim, el guapo Francisco Esteban u Oliveros de Castilla. Después, ya en la plaza, esperábamos con impaciencia la llegada de los alabarderos, que aparecían con sus capas blancas y sus pífanos, mandados por un teniente coronel viejo que empuñaba una espada con ademán tembloroso, como si estuviera a punto de llevar a cabo un acto terrible. A veces entrábamos o salíamos de la plaza con tropas provinentes de alguno de los cuarteles del barrio de Argüelles, al son de pasodobles como el de la Banderita o Los voluntarios, llevando el paso. Yo creo que don Ciro se consideraba el jefe de aquella serie de jubilados, repartidores, vagos, chicos que hacían novillos y demás gente callejera, la cual sentía un amor por la patria, expresado por sencillos y maravillosos toques de corneta; yo confieso que el teniente coronel, con su mosca, sus lentes y su temblor me producía un respeto extraordinario y que participé de la emoción patriótica, colectiva, de los pasodobles; también de la majestad de la realeza. Y así como el recuerdo de mi abuela rezando el rosario en Vera, en «Itzea», me ha permitido no tener de la religión una idea demasiado fría, así, también, las emociones infantiles de la parada me hicieron ser en la juventud menos antimilitarista que lo eran mis camaradas de estudios. Don Ciro me inculcó un patriotismo infantil, popular y un respeto por la disciplina militar, al menos en teoría, muy poco noventayochesco, según la doctrina aceptada.
Pero todo esto pasó hace mucho (105-106).

O este otro sobre Manuel B. Cossío y la gente del entorno de la Institución Libre de Enseñanza, desde la simpatía, aunque no sin crítica:
Para mí, por otra parte, y considerándolo como elogio, los hombres de la generación de Cossío y de otras posteriores que descollaron en la vida intelectual y artística, dentro de cauces parecidos, fueron hombres de una ingenuidad enorme, en un país de gente astuta, ya que no inteligente. Se dieron cuenta de muchas lacras y lacerías, pero juzgaron que había fórmulas generales o particulares para sanar de ellas. Creyeron en la Pedagogía, en la Ciencia, en el Arte. Creyeron incluso en la virtud de los cambios políticos. Acaso conocieron menos a los españoles o a cantidad de ellos. Su misma preparación, su misma formación moral, los aislaba, hasta cierto punto, de amplios sectores que, por su parte, tenían de ellos (o fingían tener) una idea falsa en absoluto." (221-222).