El making-off

Tengo que pedir disculpas a todos los que engañé con la supuesta noticia de El país, empezando por mi hermana Eva: cuando me llamó ayer y vi que había picado me tuve que reír (una vez más) y ella lo encajó deportivamente (¡es más maja!).
Sólo que he perdido un poquito del capital de confianza que podía haber conseguido hasta ahora: prometo solemnemente que no lo volveré a hacer, que esto de mentir es muy malo -el cuento de Pedro y el lobo-; y en mi caso peor, que se me llena la boca estos días con lo del Caritas in veritate y el amor a la verdad y con no mentir nunca y luego lo sacrifico todo por una broma, por mucha gracia que me haga.

Quizá a veces sea bueno recordar que el emperador va desnudo -me justifico a mí mismo, que parezco tan fariseo como la Defensora del Lector de El país o incluso más todavía que el Consejo de Estado (que no se me ocurre, no sé por qué, nada más fariseo que eso)- pero no, ni siquiera en este caso merece la pena engañar, que se quiebra la confianza.

Por otro lado, tengo que decir que me reí mucho mientras pensaba y hacía la supuesta noticia y  la fiskeaba con supuestos comentarios de indignación apenas contenida. No sé si a todos os ha hecho [maldita la] gracia, pero yo me he reído mucho pergeñándola.

Tengo que explicar mis fuentes:
-Primero pensé en el CGAC, que volví el sábado [los he tenido vetados todo este verano por una exposición malota que ni siquiera ha producido escándalo, que están gafados los pobres; y por cierto que ahora hay unas fotos admirables de Diane Arbus, ya hablaré de ella]. Y era buen momento justo ahora, que estaban sin director y nadie podía pensar que les criticaba por motivos políticos. Yo ya he explicado mi ideal para el CGAC, muy lejos de lo que piensa el nuevo Conselleiro de Cultura, cuyo único mérito parece ser que estaba en New York y conocía a Leiro. Y yo ya sabía que el sistema que promovía el PP de nuevo director no va a servir para nada, como explicó no hace mucho Enrique Andrés Ruiz: los de la cuadrilla eligen a uno de la cuadrilla y punto.

-Luego me acordé de lo de fiskear con este fiskeo sobre nuestro [aquí me refiero a Galicia] gran intelectual orgánico.
-Las fotos eran pura envidia de las que hace Juanjo, sobre todo esta. Yo, ya que nunca haré algo de ese nivel, ahondaba en la parodia con el título de 'Proxecto Castaña' (los arquitectos dicen 'esto es una castaña' cuando quieren decir que algo es muy malo). Partía de algo serio: el cariño que le tengo a ese castaño por el que paso todos los días y el pensar ahora en lo que disfrutarían mis hermanas y mis sobrinos cogiendo castañas del suelo. Pero no por saber que son malas dejéis de ver mis fotos de castaños y castañas.
-La parodia sobre el idioma es ya vieja, exacerbada por las charlas últimas con un amigo brasileño, que se ríe de la ortodoxia galeguista y de los delirios de grandeza de los portugueses, cuando ellos -los brasileños- son el 95% de los hablantes del portugués. También la lectura de un trabajo de una alumna en gallego,  en el que encontré varias faltas (y eso que sólo habla en gallego) me dio para la parodia de esa lengua 'demasiado pura' que nadie consigue escribir bien.
-Pensaba que bastaba con enlazar a una noticia distinta para que se viera la trampa. Era un pequeño homenaje a Obabakoak (sí, en tiempos me gustó ese libro; me gustaban también los cuentos de Manuel Rivas entonces: qué cosas), en concreto a ese cuento sobre alpinistas que es una imitación de otro y que en su interior tiene la clave de cuál es el autor que está imitando. Yo lo usé en aquellos tiempos para hablarles a mis alumnos sobre la originalidad y la tradición en literatura.
-Lo de ultraconservador es mi forma de asumir una etiqueta que sigue inquietándome, aunque creo que sí, que la asumo con gusto (aunque prefiero ultracatólico, ya puestos a ser mal etiquetado): estoy radicalmente en contra (sin componendas consejodeestadiles de ningún tipo) del aborto, si es eso lo que quieren decir. No encuentro resquicios para justificar rebajas en tan tremenda cuestión y ahí me voy a quedar. ¡Están acabados! (y hasta bajan en las encuestas, dice la CNN).