Me parece que un diario está más conseguido (como género literario) y es más instructivo (en el plano ético, psicológico o histórico) si el autor consigna, en el transcurso de las horas, determinadas imágenes, situaciones o pensamientos; si, conforme escribí en cierta ocasión, salva, "congelándolos", fragmentos de tiempo concreto (Mircea Eliade*).
Es menester cierta energía y tozudez para llevar un diario, al menos al principio, hasta que uno se acostumbra, hasta que encuentra el tono adecuado. En definitiva, hay algo artificioso en el mismo hecho de llevar un diario íntimo. En ninguna otra parte, escribir me parece más falso. (...) Escribir, si no me ayuda a comunicarme con alguien (sea a través de una carta, un artículo o un libro), está empezando a parecerme al menos al principio, algo absurdo y desprovisto de intimidad. (Mihail Sebastian**).
Este blog no es un diario íntimo, porque quiero compartir con la gente fragmentos de tiempo concreto. Espero que no sea inútil, que al menos sirva para comunicarme con alguien. Gracias por los comentarios, ayudas, críticas, desacuerdos.
*Diario (1945-1969), 15 de diciembre de 1946, p. 34-5.
** Diario (1935-1944), 1 de enero de 1941, después de medio año sin escribir.
Parabens! Dende a débeda do teu aprendiz de blogueiro. Espero que durante moito tempos segas repantindo ideas cos teus post escritos en voz baixiña na rede.
ResponderEliminarFelicidades, haciendo la cuenta, debo ser uno de tus primeros lectores.
ResponderEliminarCompostela es un rincón indispensables para mi.
¡Feliz cumpleaños! No sabes cómo deseo poder repetir lo mismo el año que viene.
ResponderEliminarGracias por compartir tu tiempo.
¡Albricias y parabienes!
ResponderEliminar¡Felicidades!
Pues han pasado diez y aquí estás, estamos también.
ResponderEliminarUn abrazo