Intento no leer El Correo Gallego, que recibimos en casa. Era un periódico pueblerino de Santiago y ahora es un periódico pueblerino progre. Esta era la portada hace unos días:
El artículo es de pago, y mejor así, porque la idea de fondo es que estaría bien que hubiera más protección política para lo que quieren convertir en una clase aparte, dentro de esa idea tan perversa de "variedades de familia plurales", tan del gusto de Podemos, Sumar y similares. Aunque también parece que el PP, como siempre, se apunta, como se acaba de ver en Ciudad Real.
Una cosa es la familia, la de toda la vida, padre y madre e hijos (si los tienen) y otra las situaciones sobrevenidas, que no son "tipos de familia" estables, sino realidades que han sucedido y que no habría sido deseable que sucediesen. No es bueno quedarse una mujer viuda, o que un hombre abandone a su familia. Los que quedan, quedan en una situación peor, pero no tiene el Estado por qué convertirlos en una clase. Y hay algo perverso, que en esa clase metan a los que dejan a los niños ya desde el principio sin uno de sus progenitores, porque lo prefieren así.
En el artículo hacen una torticera equiparación con las familias numerosas (a las que, por lo demás, no hacen más que dar palos en todos los estamentos políticos y a las que El Correo Gallego jamás pondría en la portada), exigiendo como un status de "familia monoparental". En vez de cuidar a las familias y sus necesidades, que son muchas, quieren que centremos los recursos en convertir esas situaciones en las deseables.
¿Por qué no exigís que el Estado apoye a todos los que tienen niños? ¿Por qué no bajar más los impuestos a los que tienen niños, sea la que sea la situación en que estén? Si tienen más hijos, les tendrían que bajar más los impuestos y eso sería muy bueno: incluso deberían quitarles los impuestos a los que tuviesen más de tres hijos, por ejemplo. Ahora, copiadme esa idea, a ver. Pero no caerá esa breva.
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