Terminé ayer Correo literario (ya hablé aquí del libro), las contestaciones que Wislawa Szymborska daba anónimamente a quienes le mandaban textos para publicar. Me he copiado dos, de las últimas páginas (162 y 163). Esto es lo que le contesta a uno de Trzebinia:
Pregunta usted qué opinión tenemos sobre Homero. Hasta ahora, la mejor posible. ¿Por? ¿Ha pasado algo?Y a uno de Varsovia:
Así que sus amigos le llaman el nuevo Lec. Eso, lo único que demuestra es que lo nuevo no siempre es mejor.Lec es un conocido aforista polaco. Busco en el blog las veces que lo he citado (aquí, aquí y aquí) y me he encontrado en el último (pero miradlos todos, que son una maravilla) estos aforismos que, curiosamente, hoy me consuelan mientras me estoy lamiendo las ilusiones:
¡Equivócate en grupo!
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Mi optimismo es total: si el ser humano pulverizó las leyes morales, ¿por qué no habría de hacer lo mismo con las leyes de la física?
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Hay grandes palabras tan vacías que su interior es capaz de aprisionar naciones enteras.
Tu blog es diferente. Bueno, esto no es decir nada nuevo, seguramente todos son diferentes. Creo que quiero decir que es original, diferente en ese sentido.
ResponderEliminarAyer compré en el pequeño rastro de Zaragoza un álbum de fotos familiar. Es... fascinante, porque tengo que deducir todo. Unas treinta fotos de los años sesenta y alguna de los cincuenta. No conozco a nadie de las personas. Igual tengo que pedirte ayuda porque hay un par de fotos con una portada singular y una iglesia que debe ser, supongo, Fátima, porque en Lourdes sí he estado. En fin, algo fascinante, como te digo. Hay que leer las fotos, y su reverso, como un juego para adultos.
Y, ¿por qué las tiraron?
Un abrazo
Es fascinante ver fotos de desconocidos. A mí me sorprende que haya quien las tiré.
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