Dejo por un momento el placentero -pero no escapista, eh- y demorado contar de mi agosto en Estocolmo para remangarme:
No voté a este gobierno, lo que no impide que me haya decepcionado y me siga decepcionando profundamente (a la oposición ni la voté ni la votaré: esos -cuyo faro fue aquel culpable de tanto que padecemos- no pueden decepcionarme ya).
Al fin, estos de ahora presentan un anteproyecto de ley de educación y van y reducen todavía más las asignaturas de latín, griego y cultura clásica. El griego queda solo como una optativa de oferta optativa* en los dos cursos de la muy minoritaria rama de Humanidades del muy minoritario Bachillerato de Humanidades y Ciencias Sociales.
Y voy a leer ese anteproyecto, por no hablar de oídas, y me encuentro que la ley con este párrafo (PDF):
La educación es el motor que promueve la competitividad de la economía y las cotas de prosperidad de un país; su nivel educativo determina su capacidad de competir con éxito en la arena internacional y de afrontar los desafíos que se planteen en el futuro. Mejorar el nivel de los ciudadanos en el ámbito educativo supone abrirles las puertas a puestos de trabajo de alta cualificación, lo que representa una apuesta por el crecimiento económico y por conseguir ventajas competitivas en el mercado global.
Leed el resto de la introducción, que es de vomitar, un puro bullshit.
Visto lo que
Y diréis: este está mirando por su canuto. Sí, es mi canuto, pero es un canuto importante.
En la Sociedad Española de Estudios Clásicos se están moviendo, a ver si podemos arreglar el desaguisado antes de que se convierta en ley.
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*los centros podrán ofrecer, entre otras materias optativas, las materias específicas no cursadas por el alumno por corresponder a otra vía (dicen). Ahí ponen el griego, por detrás de Tecnologías de la Información y la Comunicación, que es de oferta obligatoria, también en el Bachillerato de Humanidades, sí.
Tremendo preámbulo. ¿Has leído cuando Patrick Leigh Fermor tiene secuestrado a un oficial alemán en las montañas de Creta y el alemán empieza a recitar a Virgilio en latín (creo recordar) y el inglés lo completa?
ResponderEliminarA Fermor lo llevaron allí por haber destacado en sus estudios de griego en la universidad.
No, no he leído a Fermor (otro para la lista de espera).
ResponderEliminarAhora estudiaría TIC y haría un app que le convertiría en millonario, para gastarse el dinero en arte contemporáneo, con lo que completaría el círculo.
Es un clásico de nuestros gobernantes confundir educación con formación, así como establecer una gran distancia entre lo importante que les parece la educación, en general, y el poco dinero que dedican a eso. En fin, esto es lo que hay, desde siempre.
ResponderEliminarUn abrazo
Me parto.
ResponderEliminarYo tampoco voté porque no pude.
Quiero que vuelva Felipe, para que lo derroque Aznar. Quiero volver a tener catorce años.
Ángel, todo el mundo sabe que las letras no sirven para nada práctico. Joseph Joubert tiene un pensamiento muy interesante al respecto, seguramente equivocado, a juicio de nuestros mandatarios: "las matemáticas hacen el espíritu certero en matemáticas, y las letras lo hacen certero en moral. Las matemáticas enseñan a hacer puentes, y la moral enseña a vivir"
ResponderEliminarQué lamentable preámbulo de lo que sea
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