sábado, 26 de mayo de 2012

Clase 3 sobre el sacrificio

Teofrasto es alguien que no se esperaría que fuese tan contrario al sacrificio animal, sobre todo en cuanto discípulo de Aristóteles. Pero los dos van a la madre del cordero -nunca mejor dícho:

FORTENBOUGH, W. W., “Theophrastus: Piety, Justice and Animals”, en Theophrastean Studies, Stuttgart, 2003, p. 173-192
En Sobre la piedad Teofrasto hace una historia de la humanidad desde los orígenes en relación con las diferencias en la dieta y el sacrificio, con el objetivo de condenar el sacrificio animal. Hay 5 etapas:
1. sin animales, los hombres ofrecen hierbas.
2. cuando aparecen los árboles (especial mención del roble), ofrecen bellotas
3. la tercera son los inicios de la agricultura, con ofrendas de legumbres y granos; luego aprenden a moler y ofrecen pasteles de harina y luego vino, miel y aceite.
4. el sacrificio humano, por culpa de las guerras: los dioses les castigan.
5. compromiso del sacrificio animal (p. 173-4).
Hay seis razones en contra:
1. si hay frutos, por qué matar animales.
2. los frutos son lo mejor que han hecho los dioses, luego eso es lo que hay que devolverles.
3. los sacrificios no deberían causar daño.
4. los sacrificios deberían ser santos, y no lo son si hacen contra uno μὴ ἐθέλοντος [y el problema es que a los animales se les quita su alma].
5. Lo no costoso y fácil de conseguir es más santo que lo que cuesta adquirir y les agrada a los dioses y está disponible para todos.
6. Más importante es el carácter del que sacrifica y el buen comportamiento en general que la cantidad de lo sacrificado. (p. 179)

E. BROWNING COLE, “Theophrastus and Aristotle on Animal Intelligence”, en W. W. Fortenbaugh, D. Gutas (eds.), Theophrastus. His Psychological, Doxographical and Scientific Writings, New Brunswick, 1992, p. 44-62
Aristóteles hace una distinción clara entre hombres y animales, basada en las distintas capacidades del alma (psyché - ψυχή). Pero reconoce a los animales memoria, un cierto nivel de inteligencia y capacidad de aprender (p. 46).
53 Teofrasto: frente a las plantas, los animales tienen psyché. Está claro que no la entiende del mismo modo que Aristóteles (53).
54 Browning Cole cita un pasaje de Porfirio (De abst. 3.25.3) donde Teofrasto dice que los humanos son congéneres (syngenéis -συγγενεῖς) entre sí y con los animales. Hay connaturalidad (oikeiótes -οἰκειότης) entre sus emociones (πάθη), ademas de la semejanza de ‘piel, carne y fluidos’.

2 comentarios:

  1. Muchísimas gracias. He aprendido mucho con esta clase. En los animales y en la dieta, como dice Teofrasto, hay una clave de todo esto. Que Abel fuese el hermano ganadero y Caín el agricultor nos salva de ser vegetarianos, como aquella visión tan importante de San Pedro: "Mata y come", pero tendríamos que hacerlo (ambas cosas) con temor y temblor. La bendición de la mesa es una oración fundamental, creo.

    ResponderEliminar
  2. Por eso es tan importante la distinción entre hombres y animales y también quién/qué puede (o no) ser víctima.

    ResponderEliminar