Estoy leyendo Tolkien, autor del siglo, de Tom Shippey: me lo recomendó un tolkienólogo y no me está defraudando en absoluto. Tengo una gran sintonía con lo que dice, porque explica muy bien qué es lo que hace que entremos en sintonía con una obra como la suya. Hace un análisis magistral del mal tal como lo ve Tolkien: ve dos líneas, la de Boecio del mal como negación (ausencia de bien) y la del mal como realidad en sí misma; ambas cosas se resumen en el Padrenuestro: no nos dejes caer en la tentación / y líbranos del mal. La tentación de lo que se percibe como bien pero es su ausencia y el peligro de que el mal nos domine.
Como leí por primera vez a Tolkien a los quince años le tengo que estar muy agradecido por la ayuda que me dio para adquirir una cosmovisión concreta. Ahora que lo pienso, fueron fundamentales para mí Tolkien, Orwell (Shippey muestra la estrecha relación que tiene con Tolkien) y Soljenitsyn. ¿Cómo habría sido si hubiera leído en cambio a Nietzsche, Umberto Eco y Kundera?
Te recomiendo las biografías de Joseph Pearce sobre Tolkien, son tremendas
ResponderEliminar