martes, 3 de mayo de 2022

Mi biografía académica hasta COU 2

En 4º de EGB, con nueve años, tuvimos a doña Tomasa, otra maestra que llevaba toda la vida dando clase. Yo le tenía terror. Tenía venillas azules en la cara y pómulos salientes. Daba bofetadas, tiraba de las patillas. Yo creo que nunca me pegó, o mínimamente, porque ya me encargaría yo de portarme extremadamente bien. Sí que recuerdo que ese curso llegaba yo un buen rato antes de empezar las clases, con mi cartera por delante, para estar el primero en la fila de entrada a la escuela: ahí está la semilla de mi sentido preciso de la puntualidad, en el terror. Era una profesora excelente. Decía un terrorífico ¡me va a dar un síncope!, que anunciaba tormenta. No sé por qué, pero la asocio a Historia; me queda una frase: Los romanos llegaron a España en su lucha contra Cartago. Creo que nos hablaba bien de los romanos. Estoy seguro de que era una bellísima persona.

En 5º nos dio clase doña Mari Carmen. Era muchísimo más joven. Iba con el pelo corto. La asocio a las clases de matemáticas. Estábamos en un aula de la planta baja, que daba al patio. Es ese saliente con cinco ventanas iguales

La de vueltas que le dimos a ese patio con la bici: nos pasábamos la vida jugando por ahí. En verano también, porque mi padre estaba por allí y vivíamos al lado, en la casa de los maestros.

3 comentarios:

  1. Yo era más de Cartago.

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  2. Seguro que doña Tomasa también lloró cuando murió Franco. Ahora sería una Charo feminista defensora de la aprendizaje por competencias.

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    1. No, era una madre de familia numerosa y quería que aprendiéramos de verdad, conocimientos: nada más lejos de una charo. Por suerte no me dio clase nunca ninguna charo.

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