Algunos son -me pareció- muy cinematográficos: un cineasta podría hacer con ellos algo verdadero y bonito. Por poner un ejemplo (53.1):
La brisa tañeA unos hipotéticos alumnos de cine les daría este otro, a ver cómo lo trasponían en imágenes (64.3):
las cuerdas de los mástiles.
El mar en calma.
En el columpioTodo visto con grandísima atención a la realidad (y con alegría, y con sentido del humor: 20.1):
ni un pájaro ni un niño.
Tan solo el viento
Si parpadeo,Quizá es que yo tenía en mente alguna película de Tarkovski, pero creo que es así, que son haikus muy cinematográficos.
se ocultará en la grieta
la lagartija.
Susana Benet tiene haikús geniales, como estos dos:
ResponderEliminarTienda de especias.
Me llevo sin pagar
todo el aroma.
Se posa el sol
en la taza de té.
Bebo la luz.