martes, 19 de noviembre de 2013

Museo Nacional de Escultura de Valladolid 2

Sales de las dos primeras salas al patio y te pasmas de tan perfecto como es (y a continuación es cuando entran las corrosivas dudas de si estará restaurado).
Y las siguientes salas son el despiece del retablo de san Benito de Valladolid de Alonso Berruguete. Es toda una experiencia tenerlo entero a la altura de los ojos, aunque a mí me descoloca tanto manierismo y nunca me he sentido muy a gusto en la órbita de Miguel Ángel:



En el piso de arriba descubro un tondo recién comprado de Bigarny, pendant de una tumba grandiosa que tienen en la capilla. Y todo esto estaba en un pueblo perdido de Soria:


La señora que vigila la sala me ve mirarlo y se alegra mucho de que lo haya descubierto. Es todo así en este Museo: una fiesta.


Y al fondo, el coro de san Benito enmarca el entierro de Cristo de Juan de Juni:


[Foto en la wikipedia de uno de los autores, Andrés de Nájera]

Es grandioso, de 1528, solo policromado en el sitial del abad de san Benito. Delante, un busto flamenco en piedra de un Carlos V muy joven, impresionantemente bueno.
Y vuelta a salir al patio, y entrada en las salas del otro lado: Juni, otras obras y autores que sigo sin saber dónde situar y que ni me atrevo a traer aquí. Quizá este gran lienzo: un calvario de Antonio Moro.

Y más adelante, mi ídolo, Gregorio Fernández. Esta vez me fijé también en el san Pedro, un pescador rudo sacado de un rincón perdido de Palestina para acabar siendo el dulce Cristo en la tierra:



Me impresionó un san Jerónimo Penitente de Alonso Cano, de barro policromado. Me gustó menos que otras veces Pedro de Mena. Me seguí quedando con las ganas de ver más obras de Martínez Montañés. Y en la sala del siglo XVIII, me quedé atento a un Crucificado de Luis Salvador Carmona.

Y abajo, la sala de los pasos procesionales, tan escénica.

Pero bah, estoy poniendo atropelladamente nombres y fotos, sin ciencia ni orden. Id vosotros allí. Visitadlo: es uno de los grandes museos del mundo, sin exageración.

2 comentarios:

  1. ¡Tienes razón!
    Pude estar allí hace más de un año y me pasé toda una mañana disfrutándolo. Absolutamente recomendable.
    Gracias y saludos.

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  2. Ángel, es admirable esta labor que haces. El domingo por la noche me puse a leer tu blog, que es un modo magnífico de elevarse uno, y me quedé sin hacer el comentario sobre la entrada I del museo. Supongo que me interrumpiría algún niño. Pero que conste que es una auténtica gozada re-mirar estas obras desde tu (inteligente y ameno) punto de vista. Muchas Gracias.

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