Ma dimmi: quei de la palude pingue,
che mena il vento, e che batte la pioggia,
Pero dime: los de aquel pantano cenagoso,El arte, nieto de Dios:
que arrasa el viento, y la lluvia azota (11.70-71)
che l’arte vostra quella, quanto pote,
segue, come’l maestro fa’l discente;
sì che vostr’arte a Dio quasi è nepote.
que vuestro arte, en cuanto puede,El arte imita a la naturaleza, que sigue a Dios, Artista - natura lo suo corso prende dal divino ’ntelletto e da sua arte (99-100).
sigue, como al maestro el que aprende;
y así vuestro arte, de Dios es como el nieto (11.103-105).
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Una tontería, pero me hizo gracia. Se lo dice Virgilio al Minotauro:
tu credi che qui sia’l duca d’Atene,
che sù nel mondo la morte ti porse?
¿Te crees que aquí [castizo =este de aquí] sea el duque de AtenasO simplemente error mío, porque parece más sencillo «aquí está el duque de Atenas» (= Teseo).
que arriba en el mundo muerte te dio? (12.17-18).
Con la venida de Cristo, como que el mundo sintiera amor.
da tutte parti l’alta valle feda
tremò sì, ch’i’ pensai che l’universo
sentisse amor, per lo qual è chi creda
più volte il mondo in caòsso converso;
por todas partes el alto valle hediondoVirgilio piensa que todo se debe a una contracción y expansión cíclica por la fuerza del Amor, al modo de Empédocles. A la vez es muy bonito cómo explica un tema bien peliagudo: la aspiración del mundo hacia Dios y su agitación cuando Jesús murió y descendió a los infiernos y destruyó el poder de la muerte.
tembló tanto, que yo pensé que el universo
sintiera amor, por lo cual hay quien crea
que muchas veces el mundo volvió al caos; (12.41-46)
En las notas dantescas se suele decir que esa idea del arte como nieto de Dios es un concepto escolástico y ya está. Yo percibo, sin embargo, mucha ternura ahí. La naturaleza, tan bestia a menudo, es un hijo y ya se sabe que los padres tienen que estar a las duras y a las maduras. Con el arte, Dios se puede permitir ternezas de abuelo. Eso está ahí, creo.
ResponderEliminarYo justamente la palabra que no usaría ahí es 'escolástico'. La naturaleza que toma su curso del intelecto divino (y del Arte de Dios, eso sí que es arte) como madre del arte (y lo de ser nieto, mejor 'quasi' nieto) son planteamientos bien llamativos (y paternales, en el mejor sentido de la palabra).
ResponderEliminarCon tanta erudición yo desvanezco y no me extraña nada que el universo sienta tanto amor.
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