miércoles, 14 de noviembre de 2012

Medelhavsmuseet III

Yo las momias del Museo Británico me las salté: demasiada gente. En este Museo, en cambio, como no había nadie y la sección de Egipto era abarcable, me resultó una visita muy instructiva.

Esa preocupación angustiosa por salvar de la corrupción a aves rapaces:



Peces:


Gatos:

[Ejem, a lo Vari Caramés]

Tenían también expuesta una cámara funeraria, talmente una alcoba, sin faltar nada. El Más Allá como Más Acá preservado.

Y hace poco leía en la Ilíada (23.161ss.) que Aquiles pone en la pira funeraria [los griegos, más que por la preservación material, optaban por el traslado de la materia a través del fuego] de Patroclo cuatro caballos y dos de sus perros, para que lo acompañen allá.

Antes no, pero ahora creo que entiendo cada vez más esa presencia de los animales también Allá lejos / Allá abajo. Hoy lo explica muy bien Enrique: y en el Purgatorio bien cuadra que estén también.

5 comentarios:

  1. Es increíble, como dices, las energías gastadas en conservar esos bichos. No conocía esa faceta de la momificación, si la representación simbólica y a través de objetos o pictogramas del ajuar del difunto en la otra vida. A mí también me ha hecho pensar el estupendo artículo de Enrique. ¿Dónde irán los animales? A ningún sitio supongo...Pero en el Cielo, a lo mejor están, aquellos que han sido especialmente amados, ¿por qué no? Es casualidad, pero precisamente hoy, en facebook, también me ha conmovido la foto de un perrito que ha colgado una niña porque hace ¡cuatro años! que murió. ¡Y todavía lo recuerda y le agradece los buenos momentos! La verdad a mí, que soy tan ajeno al "mundo animal" , me admiran y alegran esos loables sentimientos.

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  2. Yo yambién soy "muy ajeno al mundo animal", pero claro, los animales no son solo decorado. Y en ninguna parte pone que el cielo sea un sitio solo con nubes; lo que se dice es que habrá "un cielo nuevo y una nueva tierra".

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  3. No recuerdo donde leí que alguien (un "progre" sería) dejó de creer cuando un cura le contestó brutalmente en su infancia, a la pregunta de dónde estaría su perro recién muerto, que en ningún sitio. Triste fe la que se pierda sólo por eso. Pero la anécdota sirve para llamar la atención sobre el amor que se le puede llegar a tener a los animales y la sensibilidad con la que debemos actuar (sobre todo los "ajenos al mundo animal") cuando se plantean estas cuestiones.
    Anda que vaya trago para toda la familia, cuando se nos murió el pajarraco que le habían traído los Reyes a los niños el año pasado. Sobre todo cuando lo veíamos, tembloroso, en su agonía y nada podíamos hacer. Me dio un no sé qué tirarlo a la basura por la noche cuando ya nadie me veía. ¡Y era sólo un pájaro!
    Bueno, ese cielo y tierra nueva, entre pájaros, perros y gatos, seguro que superará con creces nuestras expectativas.

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  4. Buenísimo el artículo de Enrique. Y Tolkien, también, trata con bastante seriedad el asunto de nuestra relación con los animales y nos recuerda que antes de la caída, teníamos una relación mucho más cercana con ellos:

    Some are pardonable weaknesses or curiosities: such as the desire to visit, free as a fish, the deep sea; or the longing for the noiseless, gracious, economical flight of a bird, that longing which the aeroplane cheats, except in rare moments, seen high and by wind and distance noiseless, turning in the sun: that is, precisely when imagined and not used. There are profounder wishes: such as the desire to converse with other living things. On this desire, as ancient as the Fall, is largely founded the talking of beasts and creatures in fairy-tales, and especially the magical understanding of their proper speech. This is the root, and not the “confusion” attributed to the minds of men of the unrecorded past, an alleged “absence of the sense of separation of ourselves from beasts.” A vivid sense of that separation is very ancient; but also a sense that it was a severance: a strange fate and a guilt lies on us. Other creatures are like other realms with which Man has broken off relations, and sees now only from the outside at a distance, being at war with them, or on the terms of an uneasy armistice. There are a few men who are privileged to travel abroad a little; others must be content with travellers’ tales.

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  5. El artículo de Enrique es excelente. Te agradezco mucho el texto de Tolkien: está el tema de la ruptura de la armonía de la creación que me interesa tanto.

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