viernes, 14 de octubre de 2011

Cierro el capítulo de Estonia

De lo que me queda de mis notas:

El héroe a caballo en el parque de Viljandi parece que no hizo nada heroico a caballo pero tuvo la suerte de ser alguien en la época adecuada (los años 20 y 30; la independencia: el periodo idealizado). [Un rato después: miro en la wikipedia: glup, catorce años encarcelado en Rusia y muerto allí, vaya, mejor me callo].

Proyecto fotográfico que no voy a hacer, pero que me gustaría poder y saber hacer: recorrer las carreteras estonias fotografiando esas paradas de autobús en medio de la nada que hay por todas partes. Y hacer fotos a gente muerta de frío esperando el lejano autobús. Y las paradas de gran sabor soviético que todavía quedan.

Palabras que reconozco en Tallinn: Piiskopi (episcopi: calle del Obispo) y Apteek (apotheke: botica/bodega)

Muchas mariposas blancas en el suelo del camino: se levantan todas cuando pasamos.

No tienen vodka (eso me dijo uno de Estonia que pone en su traducción oficial de la Biblia, en vez de no tienen vino).

Los cristales de las ventanas de la casa en la que vivíamos eran como de otro tiempo, con esas partes como mal fundidas que si mirabas por ellas te dan la imagen deformada: me recordaron todo el tiempo a Castrojeriz.

5 comentarios:

  1. Buenos días Ángel. Una magnífica excursión que espero nos llene a todos de buenos frutos.Un abrazo.

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  2. Excelente serial, pero por lo visto en las fotografías, hay aún mucho por contar.

    Enhorabuena.

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  3. Demoledora la traducción literal de la Biblia...

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