El otro día estuvimos viendo un trabajo de mi hermana María Jesús (que acaba de terminar su segunda carrera: ahora Magisterio -se hace carreras como otros se hacen jerseys) sobre la enseñanza en la generación anterior.
El trabajo lo hizo sobre mi madre y puso sus fotos de esa época: del libro de escolaridad, de otros documentos. Y en todos sale bien guapa, como siempre.
Ahora es el Instituto -no femenino- Cardenal López de Mendoza.
Un edificio como ese educa, hasta los malos estudiantes tienen que salir desbastados.
ResponderEliminarFelicidades a tu madre y a tu hermana.
Y qué trabajo tan bonito. Precisamente el libro o el cuadernillo de escolaridad (porque yo tuve un libro de tapas azules duras, pero los siguientes ya fueron cuadernillos) acaba de pasar a la historia, como el libro de familia. Algo tienen en contra de los libros.
Precioso el "acabose". Nada del año tal de cual: acabóse y aquí estoy. Aunque igual se refiere a la inscripción. Es lo mismo, me encanta.
Es verdad, es un "acabose" impresionante, el "acabose" metafisico.
ResponderEliminarPues felicidades a su amable madre.
ResponderEliminarYa sé que no es lo mismo un jardín que un páramo y que no se pueden comparar Burgos y Alicante.
Pero en este páramo, por la parte que da a Murcia, tenemos una florecilla -¡oh!- en Orihuela. Es el Colegio de Santo Domingo.
Ya sé, ya sé que no es lo mismo. Es lo que hay.