lunes, 19 de julio de 2010

Por Darwin me echan

Estuvimos en las Vísperas en la Abadía de Westminster (y seguro que hay gente que piensa que fuimos a ese acto religioso para no pagar los 20 euros de la entrada, pero es que hay gente muy mal pensada por el mundo).
Y vas allí y cantan salmos y rezas padrenuestros y el Credo -hasta con lo de Creo en la Santa Iglesia Católica, que te preguntas cómo lo entenderán y si de hecho lo entienden- y el coro es excepcional, pero nos fuimos a la media hora porque era domingo y teníamos que ir a Misa: y primero es la obligación que la devoción.
Y salimos de puntillas mientras nos seguía un tipo de frac que hacía como de sacristán y/o acomodador.
Y ya estábamos casi fuera cuando vi en el suelo una lápida con el nombre de Charles Darwin y le dije a Suso: mira.
Y me paré un segundo y el guardés del frac casi me pega una leche: que allí no se estaba para hacer turismo y que fuera y que silencio.
¡Y mira que tener que salir corriendo avergonzado de una iglesia -por muy anglicana que sea- por querer ver la tumba de Darwin!

2 comentarios:

  1. "Por Darwin me echan", leí en mi lista de blogs amigos que actualizan, y si no fuera porque ya pasaron muchos años hubiera pensado que te habían echado de la facultad o de algún insituto por algún tema de evolucionismo, religión, etc.

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  2. A mí me pasó igual cuando quise visitar el Rincón de los Poetas. Emociona rezar el mismo Credo, realmente.

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