lunes, 25 de septiembre de 2006

Novedades CGAC (I)

Como Periféricos se va a Madrid, caigo en la cuenta de que me cae a mí en solitario la responsabilidad de mantener encendida la llama inextinguible de la sana crítica artística en Santiago de Compostela.
Ayer por la tarde fui al CGAC, a ver qué había. Todo exposiciones nuevas.
Había a la entrada una que se llamaba Paperworks o similar (en inglés, así nos quitamos de líos español / gallego); eran cosas en formato papel (periódicos, revistas, etc) pero que ¡oh, prodigio! eran objetos de arte, en virtud de un sortilegio: porque lo decían sus autores y porque está en un Centro de arte. Además, tenía los típicos guiños postmodernos: referencias a la infancia (había un Juegos reunidos Jeyper), sus cositas picantes para que los que comenten puedan citar a Foucault, ya sabéis, referencias a los comics; vamos, lo de siempre.
Al entrar, en una pared una monja aconseja a unos niños que hagan una colección. En una mesa hay un expositor con paquetes de cromos y muchos álbumes donde pegarlos. Yo -inocente de mí- pensé que se trataba de quedarse con ellos para hacer una colección, y cogí un paquete y lo abrí. Cinco o seis pegatinas tontitas (es la única palabra que se me ocurre) y una tirando a sicalíptica (je, je: una monja, la pegatina verdoncha, je, je: pero qué modernos / postmodernos somos).
En esas estaba, involucrándome en la creación artística, evitando adoptar la típica actitud pasivo-burguesa y en eso que un segurata me explica, cuando ya me iba, que no me lo podía llevar. Me cabreé, pero qué podía hacer: me quejé de que no hubiera unas indicaciones de uso. El segurata me explicó que los cromos se vendían en la librería: vaya, una mercantilización burguesa del arte.
(Continuará)

2 comentarios:

  1. Pues si que ha vuelto con fuerzas!!

    Yo que tanto he combatido sus críticas y su escepticismo sobre el arte en Compos ("...juventudes socialistas...") reconozco la pereza que me da acercarme hasta el CGAC después de leerle (hasta de moderneces se puede atragantar uno, y más teniendo en cuenta que todos los duchampitos salen de las mismas facultades de BBAA, y que nadie se mueva...)

    Esta exposición es el inicio de la programación de Manuel Oliveira (triste país dónde los directores de museos cambian con las elecciones), a ver por donde va...

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  2. Bueno, para empezar me puedes tratar de 'tú'.
    En realidad no critico el arte en Compostela, sino el arte que veo en Compostela (si voy a otro sitio también), porque en realidad creo que estamos muy por encima del nivel medio (en arte contemporáneo). Otra cosa es que yo ayer hubiera preferido ir al Kunsthistorisches Museum de Viena. Y en realidad me quejo por quejarme: si tenemos aquí el Pórtico de la Gloria. ¡Y la lluvia es arte!
    Mañana sigo con el comentario de la exposiciones del CGAC.

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