Con mi madre y con mi abuela en la cocina.
Empezamos hablando de la tía María y luego se fueron sucediendo los recuerdos: se turnaban en contarlos, se completaban, se contradecían; yo preguntaba algunas cosas, estaba allí de moderador.
La pequeña historia, recuerdos felices de épocas en blanco y negro:
-La emoción de mi abuela cuando de pequeña su padre le prometió un huevo entero para ella sola.
-Mi bisabuela, a la que mi madre recuerda rezando a todas horas, junto con otra señora que le hacía de acólito, muy bajita. Recogían las cenizas del hogar y trazaban sobre ellas la señal de la cruz.
-Mi madre, en Arija, recién casada, tan contenta, aunque tardaron tres meses en pagarle el sueldo a mi padre. Humedad por todas partes, y tan contenta. Mi tía Charo, que estuvo con ellos un mes, cuando tenía diez años.
De todo corazón, os deseo una feliz Navidad a ti y a tu familia (especialmente a Eva).
ResponderEliminarConcha (deseosa de repartir con los demás su esperanza y su alegría).
Admirado ARP: Muy feliz Navidad a toda la familia y por supuesto a tì tambièn. Por cierto, a mi no me disgusta que de cuando en cuando no te quede màs remedio que hablar de polìtica... son muy lùcidas tus aportaciones.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Àlvaro.