martes, 5 de abril de 2005

José Robles

He estado leyendo Enterrar a los muertos, de Ignacio Martínez de Pisón. Es un libro sobre José Robles, profesor de español en Estados Unidos. Como le pilló la guerra de vacaciones en España, se quedó para ayudar al gobierno de la República; su desgracia fue que sabía algo de ruso y trabajó de traductor para los soviéticos que vinieron de consejeros. Era muy amigo de John Dos Passos, y juntos habían viajado mucho por España (lo cuenta Dos Passos en Años inolvidables, libro altamente recomendable). De repente fue detenido y desapareció, seguramente víctima de los comunistas rusos, que cortaban el bacalao y se estaban dedicando a hacer purgas (en las que estuvo a punto de ser atrapado George Orwell), contra trostkistas y desafectos en general. No se sabe si Robles dijo una palabra de más, o es que sabía demasiado por su labor de traductor, la cosa es que desapareció y la mayoría de la gente miró para otro lado, mientras su mujer y sus hijos adolescentes mendigaban información.
El centro del libro es la cuestión moral siguiente: si había que mirar a otro lado para conseguir el objetivo final (la derrota del fascismo) o denunciar los abusos.
Escritores en el primer grupo: Hemingway, Alberti y ¡ay! Antonio Machado.
Escritores en el segundo grupo: John Dos Passos y George Orwell.
¿Casualidades?
1. La mujer de Robles se exilió a México y para vivir trabajó de traductora. Por ejemplo se encargo de la Arqueología de Creta, de J. D. S. Pendlebury (F.C.E., México, 1965), que me regaló un amigo hace un mes, cuando no sabía nada ni de Robles ni de su mujer.
2. Ignacio Martínez de Pisón era compañero de clase de un conocido mío que se ha pasado veinte años fuera de España. El otro día, al ver el libro, se sorprendió al enterarse de que su conocido fuera escritor.

1 comentario:

  1. ¡Qué historias, Arp!

    Por cierto, muy buen nuevo arte de blog. ¿Es un template ofrecido por blogger?

    ResponderEliminar