Ayer me dijo mi madre que se había muerto en Castrojeriz doña Encarna. Tenía ya noventa años y fue mi maestra en 3º de EGB (cuando yo tenía 8-9 años).
Era la pulcritud en persona: su aula estaba impoluta (cuando sus alumnos éramos niños de pueblos con calles sin asfaltar y muchos con chirukas).
Lo mejor de sus clases eran las explicaciones de Historia Sagrada con unas láminas antiquísimas que colgaba de un clavo. También cantar canciones: muchas eran religiosas. Doña Encarna se encargaba de limpiar las cosas de la Iglesia: la pura pulcritud. A los monaguillos nos daba un duro los domingos (también se encargaba de pasar el cepillo).
Sólo una vez apareció desarreglada: vino corriendo a casa y le dijo a mi padre que habían robado en la Iglesia de santo Domingo: se habían llevado los tapices, habían abierto el sagrario y habían tirado las formas por el suelo. Era un robo más de Erik el belga.
Ahora rezo por ella, aunque como decía ella de su madre, irá por el cielo con zapatillas.
Era la pulcritud en persona: su aula estaba impoluta (cuando sus alumnos éramos niños de pueblos con calles sin asfaltar y muchos con chirukas).
Lo mejor de sus clases eran las explicaciones de Historia Sagrada con unas láminas antiquísimas que colgaba de un clavo. También cantar canciones: muchas eran religiosas. Doña Encarna se encargaba de limpiar las cosas de la Iglesia: la pura pulcritud. A los monaguillos nos daba un duro los domingos (también se encargaba de pasar el cepillo).
Sólo una vez apareció desarreglada: vino corriendo a casa y le dijo a mi padre que habían robado en la Iglesia de santo Domingo: se habían llevado los tapices, habían abierto el sagrario y habían tirado las formas por el suelo. Era un robo más de Erik el belga.
Ahora rezo por ella, aunque como decía ella de su madre, irá por el cielo con zapatillas.
Todo lo dicho es cierto y que recuerdos de aquellos años me has traido con doña Encarna, solo 1 puntualización además que soy mas joven que tu y recuerdo perfectamente es que en misa de 12 los domingos a los monaguillos nos daba 2 pesetas que enseguida nos gastabamos en la tiendaa de ultramarinos de su hermana Carmen.
ResponderEliminar1 saludo
Pues muchas gracias por lo que cuentas: yo también me acuerdo de las dos pesetas y por supuesto de la tienda de su hermana Carmen.
ResponderEliminar