lunes, 7 de julio de 2025

Oficiales y caballeros de Evelyn Waugh

La segunda novela de la trilogía Espada de honor se llama Oficiales y caballeros y contrapone el ideal guerrero con la realidad de una guerra luchada en condiciones muy penosas, donde el honor se juega en límites difusos, cuando hay que decidir sobre hacer algo noble en situaciones como mínimo borrosas.

Yo me acordé del canto II de la Ilíada y caí en la cuenta de que era la primera descripción que conocía del caos intrínseco a la vida militar, ese intento de Agamenón de elevar la moral anunciando una supuesta retirada, que sale mal y que tiene que solucionar Ulises con labia y golpeando a la fascinante figura de Tersites, el soldado respondón.

Aquí seguimos a Guy Crouchback en su proceso de desencanto con el ejército, en una guerra que parece una sucesión de derrotas, donde Rusia se convierte en un aliado y entonces el enemigo se ha convertido en amigo y la nobleza de los ideales ya no se sabe dónde está, salvo en la inercia de seguir en el bando en el que te ha pillado el conflicto.

Es impresionante la descripción del final, de la retirada de Creta. Es vivirlo como con una cámara en mano, las penosas situaciones en que se encuentran.

Luego, leer la introducción es comprobar cómo en buena medida es un relato autobiográfico. El detalle del día a día, la vida militar en sus minucias, todo se describe con precisión. No es una lectura divertida, es seguir una guerra, algo siempre doloroso, pero ilustrativo: es la vida en condiciones exacerbadas. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario