sábado, 20 de marzo de 2010

Bambi contra Godzilla

Es el título de un libro de David Mamet; el subtítulo es: Finalidad, práctica y naturaleza de la industria del cine (Alba, 2006). Y me lo he leído porque hablan de él en Scriptor y en Bienvenidos a la fiesta (aquí, y muchas otras veces aquí) y eso es una garantía.
Y aunque es un libro un poco irregular me ha gustado mucho: es brillante e ingenioso; y da una visión única sobre la industria del cine. Yo pongo aquí sólo dos párrafos que me gustaron:

En Estados Unidos el sistema educativo prepara a quienes tienen un intelecto de segunda fila a medrar en un entorno burocrático. Se ensalzan la obediencia, la memorización mecánica y el orden como conquistas intelectuales. Del mismo modo que el examen de acceso a las universidades mide la capacidad del solicitante para hacer ese examen, los rigores burocráticos del sistema de estudios sondean en el neófito los umbrales del aburrimiento, la repetición, la adulación y el sinsentido (p. 46-7)

En mi opinión esto es la perfección en la creación cinematográfica esencial: una trama sencilla y perfecta, sin cháchara que distraiga (o "diálogo", como se conoce más comúnmente), y lo único que hace progresar la película son los gags; no hay nada más que eso (p. 130).

4 comentarios:

  1. ¿Y compartes el último parrafo? ¿No era a tú quien te deleitabas con "Mi noche con Maud"...?

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  2. Lo que me pasó con esa película es que esperaba que me pareciese un truño y no estaba tan mal. Está bien ver una discusión, sea en la tele o en el cine, pero parece que una película no se debe sostener sobre el nivel del diálogo, sino sobre la capacidad visual de narrar.

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  3. Desde la humildad y la inexperiencia, y viendo las películas tipo Avatar/Wall-E/Lost in translation que se hacen últimamente y en las que, por así decirlo, no se habla "demasiado", yo me quedaría con los agridulces diálogos del cine americano de mediados del XX. De hecho, hay magníficas películas en las que los gags , que aunque todavía no tengo muy claro qué son, creo que "pintan" muy poco: Tener y no tener, Suddenly last summer, e incluso algunas de Kazan o del propio Eastwood...

    Eso sí, muy de acuerdo con el inicio del pirmer parrafo "intelecto de segunda fila a medrar en un entorno burocrático".

    Un saludo

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  4. Segundo anónimo, yo tampoco es que sea del cine mudo, pero me ha impresionado mucho últimamente 'El hijo', la película de los hermanos Dardenne: quizá por eso valoro más el esfuerzo por reflejar en imágenes la acción.
    Mamet habla de 'gags' en sentido muy amplio, más como elementos que hacen avanzar la acción que como chistes, que es lo que yo entendía habitualmente por 'gags'.

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