lunes, 30 de noviembre de 2009

Wallander

Últimamente, cada vez que leo una novela, vengo aquí corriendo a contarlo, por lo raro; esta vez fue El hombre inquieto de Mankell.
Como novela es floja; la trama es flojísima, llena de chapuzas y trampas. Y puedes acertar quién es el malo simplemente si piensas qué es lo políticamente correcto en el mundo progre sueco.

Pero me alegró volverme a encontrar con el comisario, un personaje vivo, a pesar de todo.
Y luego, qué pena dan los suecos:
-su hija Linda -que no me puede caer peor- no le pone nombre a su niña ¡hasta dos meses después de nacer!
-hablan de un parque de cenizas -de cenizas de seres queridos- en Lund (Antón, podías ir a verlo y lo cuentas).
-a Wallander unos macarras le pegan una paliza; llega a duras penas al coche, pone la calefacción y al poco aparece una señora con un perro y le echa una bronca: ¡le había estado cronometrando el tiempo que tenía el motor encendido sin moverse! Y él no la manda a la mierda ni le enseña la cara llena de sangre.
-celebran el Solsticio de verano.
-varias veces piensan decir algo a alguien, pero dice el narrador: "por supuesto se contuvo". ¡Y luego hablan de Galicia!
Es un mundo postcristiano, pagano, donde todos tienen terror a la muerte, se emborrachan constantemente, y las consideraciones 'filosófico/vitales' de narrador y personajes son como mínimo banales, pero tremendas: sólo con el dolor y la muerte delante.
Y no son tan distintos, quizá sea la distancia, pero lo ves así en una novela y esas vidas sin esperanza impresionan.

7 comentarios:

  1. No he leído ninguna novela de la serie Wallander de Mankell –debo confesar que las novelas policiacas me aburren soberanamente–, pero me he aficionado a su versión televisiva. La BBC sacó una el año pasado, protagonizada por Kenneth Branagh: no está mal. Pero la buena es la sueca –que televisan de pascuas a ramos, por supuesto subtitulada– en que al comisario lo interpreta Krister Henriksson.

    ResponderEliminar
  2. Es estremecedor lo que cuentas, da frío sólo de pensarlo. Será ignorancia, pero de Dinamarca para arriba -incluidos el bueno de Soren Kierkegaard, y Dreyer- todo me da mucha pereza. Podrías ponerte a analizar por qué arrasa Stieg Larsson y su saga de "Los hombres que no amaban a las mujeres". Casi no conozco a nadie que no los haya leído (yo me lo voy a perdonar).

    ResponderEliminar
  3. Si vivieras en Suecia, con el frío que hace, tú también celebrarías el solsticio de verano.

    ResponderEliminar
  4. Pues ese "parque de las cenizas"; si no me equivoco, es una parte del cementerio que queda junto a Gettingevägen y que es realmente un lugar muy agradable; más ahora en invierno, cuando resalta el verde de tanto tejo entre las hayas desnudas. Aunque fotos no tengo; a ver cuando toque colver...

    ResponderEliminar
  5. Pues por el nombre que le dan a la Navidad, "Yuletide", parece que también celebran el solsticio de invierno.(Chema)

    ResponderEliminar
  6. ¿Sabes lo que le pasa al libro? Pues que la traducción es mala y la composición peor. Los párrafos, saltan, se inventan palabras, ... hasta escriben Googel en vez de Google ... Un desastre.

    De todos modos los que le tenemos cariño al sueco no podíamos perdernos sus propio entierro a manos del Alzheimer.

    ResponderEliminar
  7. ME HACE MUCHA GRACIA WALLANDER!! NO SE SI ES TU PRIMERA NOVELA DE LA COLECCION, PERO EL TIO ES PATETICO!! SIEMPRE TRABAJANDO MAÑANA TARDE Y NOCHE,SE LAVA Y SE CAMBIA Y DUERME EN LA MISMA COMISARIA,RECIBE A LOS TESTIGOS DE LA INVESTIGACION CON LA CARA DE SUEÑO, SOLO TOMA CAFE Y SIEMPRE SE QUEJA DE SU COCHE(QUE NO LE FUNCIONA BIEN) Y DE LA COCINA, NUNCA TIENE NADA INTERESANTE DE COMER CUANDO LLEGA A SU CASA. Y SU UNICO TEMA DE CONVERSACION APARTE DE LA INVESTIGACION ES EL TIEMPO!! VERDADERAMENTE SI LOS SUECOS SON ASI, ES PARA DEPRIMIRSE!! LAS GRACIAS QUE TENEMOS QUE DAR A DIOS DE HABER NACIDO AQUÍ!

    ResponderEliminar