sábado, 22 de noviembre de 2008

En Iria Flavia (2 de 2)

En el centro de Padrón nos damos cuenta de que es día de mercado: está todo petado de coches. Un tío nos dirige a un sitio en el que pone Aparcamiento (y que resulta ser una leira) y nos sopla dos euros: todo sea por conocer el jardín botánico, que es el tradicional jardín de senderos de arena y plátanos seculares al que han ido agregando árboles y plantas de todo el mundo: un placer, quizá pequeño, pero un placer pasear por allí y ver distintos tipos de laurel, plantas de Japón y China de formas caprichosas (pero que no lo son, que las ha moldeado Santa Evolución): hay un Ginko con hojas como abanicos de película de Zhimou.
Y luego vamos al mercado. Hay puestos de churros por todas partes, un tiovivo, negros que venden deuvedés piratas, cientos -o muchos- puestos de ropa. A la entrada el Bloque ha puesto un trailer para el que quiera disfrutar en audiovisual de un repaso de sus logros en estos cuatro años de gobierno gallego.
Entre los puestos de hortalizas una señora, que ve que nos fijamos en las berzas, nos anima a comprar. Pegamos la hebra y Jaime le dice que él lleva 12 años en Galicia: -¡pues entonces empieza a ser un poco gallego ahora! contesta la señora. Yo, que llevo casi nueve, todavía ni puedo considerarme como catecúmeno en esto de la galleguidad: debe de ser que hacen falta como mínimo diez años. Le preguntamos a la señora por el aguardiente casero que tiene al lado: nueve euros. Nos despedimos. Más adelante volvemos a preguntar en otro puesto: siete euros el aguardiente. ¡Nos quería timar y ni siquiera nos halaga!
En un puesto venden mejillones cocidos. Son geniales los puestos de semillas: hay receptáculos para semillas de grelos de distintos tipos. Y en las flores aprendo lo que es un ciclamen. Y me entero de que el cotoneaster es una pyracantha (aunque miro la wikipedia y no sé si son lo mismo, pero caigo en la cuenta de que pyracantha es acanto de fuego, y con eso ya me vale, que no vamos a aprenderlo todo de golpe.

7 comentarios:

  1. Santa Evolución... Qué mala baba :-)
    Muy bonitas esta entrada y la anterior, pero me temo que de nuevo debo corregirte: Cotoneaster y Pyracantha son dos géneros distintos; superficialmente similares y rosáceas ambas, pero distintos.

    ResponderEliminar
  2. Para ser gallego serán 10 años, pero para ser gallego de Primera sólo hay un camino...ser del Superdépor!!

    Me gusta mucho Padrón y esas ferias más aún, aunque ya no venden cerdos ni gallinas y cada vez hay menos abuelitaskosovares con gorras de marcas de piensos y si demasiada lencería y camisetas Naik. Serán las leyes del mercado, nunca mejor dicho.

    Fui una vez a la Fundación Cela, aquello tenía más vocación de regate fiscal que de mostrar algo, aunque creo que ha cambiado.
    La casa de Rosalia mola. Por cierto la última vez que estuve fue en la presentación de la biografía de mi tío pintor Carlos Bóveda, de Padrón, titulada... "O carlismo bovediano". Olé!

    ResponderEliminar
  3. Antón, gracias por confirmarme lo que sospechaba sobre el cotoneaster y la pyracantha.
    Y Nes, yo del Dépor no me hago, lo siento. Y tu comentario es excepcional: me apropio de las 'abuelitas kosovares' para mi saco de hallazgos. Y sí, es un placer visitar la casa de Rosalía.

    ResponderEliminar
  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  5. ¿ Pero comprásteis el aguardiente a siete euros o no ?

    ResponderEliminar
  6. Qué va, no compramos el aguardiente; era casero y no sabes si va a ser bueno o no. Quizá si hubiera estado más barato, no sé.

    ResponderEliminar