jueves, 19 de febrero de 2015

Me consuelo

De vuelta, me consuelo de mis estadísticas leyendo esto que decía Antímaco, según Cicerón (en Bruto 51.191):
Cuenta que se puso a leer su libro a un auditorio, pero se fueron marchando todos. Solo se quedó Platón:
Plato mihi unus instar est centum milium
«Platón para mí, él solo, está a la altura de cien mil»
No sé si alguno de vosotros está a la altura de Platón, pero yo -que no le llego a Antímaco ni a los pies- espero valoraros así.

[El propio Laudator había escrito ya sobre eso en esta entrada y en esta otra: citas impresionantes].

3 comentarios:

  1. Uno para mí es cien mil si es mi lector. Y el monógamo ya había escrito: "Una para mí es cien mil si es mi mujer".

    Gracias por el valor.

    ResponderEliminar
  2. A mí me gusta más la frase de Séneca, en la VII de las Cartas a Lucilio: "Y bien hizo aquél, sea quien fuere (pues no se sabe quién es el autor), cuando respondió con mucha oportunidad al que le preguntó para qué servía el exquisito trabajo en su arte, que muy pocos podrían apreciar: 'Me basta con esos pocos, me basta con uno, me basta con ninguno'. En lo otro podría haber una cierta vanidad. Para los que son creyentes, ese "ninguno" podría escribirse con mayúscula. Para los que no lo somos, también, aunque por razones no exactamente idénticas.

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias por vuestros comentarios, a ver si soy capaz de estar a la altura.

    ResponderEliminar